La presidenta brasileña Dilma Rousseff salió a la calle este jueves para arremeter contra el gobierno “golpista” de Michel Temer en un acto con miles de mujeres en Rio de Janeiro, tres semanas después de haber sido suspendida del poder.

“Lo que nos une aquí es la democracia de nuestro país, que fue conquistada con mucha lucha. Sabemos que lo que ocurrió fue un golpe y ahora las cosas van quedando cada vez más claras”, manifestó Rousseff ante miles de partidarias reunidas por la noche en el centro de Rio en la concentración “Mujeres por la Democracia y contra el golpe“.

En un discurso con varias menciones a la violación colectiva de una adolescente en Rio hace 12 días que espantó a Brasil, la suspendida mandataria afirmó que “la participación de la mujer es crucial” para la democracia, cuestionando también que el gabinete de Temer no cuente con ninguna mujer.

Un gobierno de hombres viejos y blancos no representa la diversidad de nuestra población“, afirmó Rousseff, insistiendo en que “ninguna de nosotras puede aceptar un gobierno ilegítimo”.

Desde su suspensión, Rousseff ha participado en actos políticos con agricultores y blogueros o activistas digitales, mientras es muy enérgica en las redes sociales donde publica sus actividades, comenta la actualidad y mantiene diálogos con internautas.