Una agitada jornada vivió este lunes Kate Middleton, quien temprano fue internada tras comenzar el trabajo de parto de su tercer hijo.

A las 07:00 horas, la duquesa de Cambridge dio a luz a un saludable niño, quien llegó al mundo pesando tres kilos 600 gramos y midiendo 52 centímetros.

Seis horas más tarde, el recién nacido fue presentado oficialmente al mundo, cuando sus padres salieron junto a él, a las puertas del hospital St. Mary, en Paddington (Londres).

Antes de partir a su hogar, la pareja posó frente a las cientos de cámaras que se apostaron en las afueras del lugar esperando tener la primera imagen del niño, quien es el quinto en la línea de sucesión al trono de Inglaterra.

Pocos minutos antes de salir, el príncipe William llevó a sus hijos, George y Charlotte a conocer a su nuevo hermano. Mientras el pequeño príncipe se veía muy tenso y no sonrió en ningún momento para los presentes, la actitud de la princesa fue completamente diferente.

La niña caminó de la mano de su padre y saludó a la prensa. De hecho, al subir hasta la clínica, se dio vuelta para volver a sonreír.

Según la agencia de noticias AFP, para celebrar la buena nueva, se dispararon salvas de cañón en Londres, y la bandera de Union Jack se izó en todos los edificios oficiales.