Con 49 años, Jordi Castell pasó de ser reconocido por su trabajo como fotógrafo y pintor, a panelista de espectáculos. Sin embargo, el artista decidió dejar a un lado la televisión por un tiempo para perfeccionarse en el aprendizaje de un segundo idioma.
Hasta Estados Unidos viajará Castell para estudiar un curso de inglés especializado en arte. Esta iniciativa tendrá ocupado al fotógrafo durante todo el 2016, desde el primer día de abril. “Voy a estudiar un curso de inglés pero en materias electivas, específicas. Obviamente yo elegí artística: moda, televisión y cine, las áreas donde más me desenvuelvo”, contó al portal de Glamorama.
La oportunidad de estudiar en Norteamérica fue brindada por Education First, compañía internacional de educación que se especializa en la enseñanza de idiomas en el extranjero. “La filial de Chicago solo admite profesionales mayores de 25 años. Es un ambiente más focalizado y localizado. Es gente que va a superarse”, explicó.
Jordi Castell l Twitter
No obstante Jordi admitió que en un principio la idea de dejar a su abuelo y mascotas le impidió decidirse con rapidez, aunque finalmente fue su familiar quien lo apoyó a continuar. “Él fue el primero en decirme que lo hiciera, que las oportunidades hay que aprovecharlas, que todavía tenía energía para volver a estudiar”, cuenta.
“Mi casa se cierra. Mis perras quedan con mi abuelo. Siento que todo se confabuló a favor para que resultara”, confiesa que su apoyo ha sido fundamental para viajar “mucho más confiado y mucho más tranquilo”.
En tanto, el panelista asegura que “el tema laboral no le asusta ni preocupa”, puesto que se manifiesta feliz de volver a vivir como estudiante y tener la oportunidad de viajar. “Saber más de moda, de televisión, de cine… La vida vale la pena con decisiones como esta. Mucho más allá de cosas superfluas, que van y vienen, este es mi concepto del lujo, cosas que uno adquiere viajando“, contó en el portal.
Jordi Castell l Twitter
Cabe señalar que Jordi Castell vivirá solo en un departamento arrendado a algunas cuadras de su centro de estudio. Oportunidad que se convierte en la segunda experiencia del artista viviendo en otro país, luego que a los 24 años viviera con un amigo en España.
