Un millonario robo afectó a un local comercial de la Galería Olivieri del centro de Concepción, desnudando la frágil seguridad que existe a pocos metros de la plaza Independencia y la Gobernación. Carabineros sostuvo que tardó apenas dos minutos en llegar, pero no pudo atrapar a los delincuentes.

La lucha contra la delincuencia parece estar perdiéndose. Si no, ¿cómo se explica que ladrones operen con entera tranquilidad a media cuadra de la plaza, a las 10 y media de la noche, sin que nadie los detenga?

Hay sospechas que los delincuentes pueden ser aquellos que la madrugada del jueves 10 de diciembre pasado, perpetraron un alunizaje frustrado en la misma galería Tomás Olivieri, por el acceso de Aníbal Pinto, todo lo cual quedó grabado en las cámaras de seguridad, al igual que en esta ocasión.

En las imágenes se ve a dos desconocidos vestidos con overol a bordo de un todo terreno -aparentemente un Honda-. Estacionan en la vereda por Aníbal Pinto, bajan y cortan con napoleón los candados de la reja provisoria instalada por los daños ocasionados en el episodio anterior.

El vehículo retrocede con todo, ingresando por la galería hasta las puertas del local ESC Outdoor. Destrozan el vidrio de una puerta y con increíble rapidez suben especies al automóvil para escapar sin oposición alguna, en 50 segundos, llevando mercadería avaluada en 7 millones de pesos.

La propietaria del local, María Eugenia Otth, no se convencía de lo ocurrido.

Trabajadores del edificio que se encontraban en pisos superiores salieron para ver lo sucedido cuando ya no quedaban señas de los delincuentes.

Carabineros aseguró que, a diferencia de la primera vez, ahora el llamado de alerta fue tardío, y frente a la labor de prevención explicó que no puede quedar personal de punto fijo en cada potencial objetivo de robo. En todo caso, ya habría uno identificado, comentó el comandante John Polanco.

No sólo la forma de actuar sugiere que son los mismos sujetos del alunizaje frustrado, sino que también las máscaras usadas, cuya similitud revelan las imágenes de las cámaras de seguridad.

El caso añade más preocupación a los comerciantes, quienes se sienten desprotegidos frente a los delincuentes que pueden actuar a cualquier hora sabiéndose impunes.