Un aumento de los controles de seguridad, allanamientos programados y refuerzo en materia psicosocial son parte de las acciones que en esta época del año se efectúan para reducir los niveles de stress y ansiedad al interior de los recintos penitenciarios.
Es una época particularmente sensible, reconoce Galo Muñoz, de la ONG Nuevos Horizontes, organismo observador de los derechos humanos al interior de las cárceles del país.
Muñoz aclara que efectivamente este tipo de acciones reducen en parte los riesgos que se pueden generar al interior de las cárceles. Sin embargo, cuestiona la efectividad de los mismos, porque afirma que toda la población penal sabe que éstas son fechas en que se realizan estos allanamientos, por lo tanto se cuidan.
Galo Muñoz agrega que han tenido acceso a información donde se reconoce que muchos de estos allanamientos se realizan para cumplir con las metas de desempeño.
Por este motivo, sostiene que no hay un sentido concreto para estas acciones e incluso sospecha que muchos de los elementos prohibidos que se incautan, luego vuelven a ingresar a los mismos recintos.
La jefa Operativa de Gendarmería, teniente coronel Helen Leal, explica que estos allanamientos se deben incrementar en estas fechas por la sensibilidad que tienen para la población penal, pero además se desarrollan otras actividades, tanto para los internos como para los mismos funcionarios, con el objeto de reducir los niveles de stress.
Además, Leal destacó que los procesos de intervención y de control han dado resultados positivos, por ejemplo, en la reducción de casos de internos fallecidos en la región de Valparaíso, donde el año 2014 se registraron 12 y este año solo cinco
