El martes 29 de septiembre, funcionarios y funcionarias del Registro Civil iniciaron un paro nacional indefinido, luego del quiebre de la mesa de negociación que mantenían con la Dirección de Presupuestos (Dipres).

Diversas manifestaciones y acciones han realizado los trabajadores del servicio, quienes desde las 10:30 horas de este lunes, iniciaron una marcha autorizada desde el Paseo Huérfanos con dirección a la Plaza de Armas, la que se desarrolló en un carácter normal y controlado.

Más de mil trabajadores se manifestaron en distintos puntos de Santiago, para posteriormente convocar una asamblea general y una evaluación de la jornada al mediodía.

La presidenta de la Asociación de Funcionarios del Registro Civil, Nelly Díaz, señaló durante la jornada, que ellos están disponibles a negociar con las autoridades, llamándolos a “no mentir más” y no amedrentar a los trabajadores que se han unido a esta movilización.

Es así que los funcionarios no indicaron si la movilización tendrá fecha de término, por lo que la Dirección del Registro Civil realizó un nuevo llamado para deponer la paralización y así retomar las funciones de cada uno de ellos.

Usuarios

Cientos de usuarios llegaron a una de las sucursales habilitadas para atención de público en la calle Concha y Toro, en Puente Alto, al igual que en calle Amunátegui, en Santiago Centro. Estos puntos se abrieron para quienes necesiten renovar cédula de identidad, sacar pasaporte u otro tipo de certificados.

Las personas que estaban a la espera de atención, exhibieron su disgusto respecto a las medidas de contingencia en cuanto a atención del público.

De las personas que solicitaban número para mañana, solamente 150 quienes lograron obtenerlo por parte del Registro Civil, generando el descontento de quienes se mantenían en la fila.

Un comunicado emitido por la Dirección del Registro Civil, indicó que entre los años 2008 y 2015, las remuneraciones de los funcionarios del servicio registraron un aumento del 70% producto de las negociaciones, la última, efectuada en 2014 con obligaciones contraídas y no cumplidas por la administración anterior, siendo este gobierno el que debe asumir y financiar estas demandas.

Según cifras del Registro Civil, en las 470 oficinas del servicio se dejó de atender a más del 90% de los usuarios que regularmente solicita certificados de antecedentes, cédulas de identidad y pasaportes, entre otros, por culpa del paro.