La Catedral de Santiago requiere invertir más de 3 millones de pesos mensuales para poder abrir los miradores a los visitantes y turistas, por lo que el Cabildo deberá buscar financiamiento.
El monseñor Juan de la Cruz Suárez explicó al diario El Mercurio que para abrir los miradores de las torres se necesita contratar a un equipo de cuatro personas que trabajen como boleteros, vigilante, guía de los turistas y personal de aseo.
“Vamos a exponer distintos frentes de solución. Posiblemente la concesión podría ser un camino, pero no queremos perder la integridad de todo, no queremos dejarlo como algo comercial sino como un servicio pastoral”, señaló De la Cruz.
Junto con esto el religioso indicó que no buscan hacer de este recorrido algo comercial y directo a las torres, sino que los visitantes puedan recorrer la catedral, conocer las tumbas históricas y distintos tesoros patrimoniales del lugar.
“Tenemos que financiar, con gran responsabilidad, a las personas que tenemos que capacitar y preparar; que guíen, que orienten y que tengan un lenguaje pastoral y no comercial. Eso es lo único que nos preocupa”.
