Un fuerte rechazo tanto en trabajadores como en habitantes de Coronel ha causado la reactivación de los trabajos de Bocamina I en esa comuna, producto de los daños que dicen ha provocado a la salud de las personas y la anulación de los recursos que las algueras y marisqueros toman como fuente de trabajo.

La seremi del Medio Ambiente de la Región del Bío Bío, Marianne Hermanns, indicó que la fiscalización la lleva la Superintendencia de Medio Ambiente, quienes están a cargo de vigilar y también castigar a las empresas en casos de que no cumplan con las normas vigentes.

“Se ha hecho una coordinación con otros organismos como Sernapesca y la Autoridad Marítima”, agregó la autoridad de Medio Ambiente, indicando que la idea es velar por que este problema no se reavive.

“El asunto es básicamente la succión de recursos hidrobiológicos de Bocamina, y la idea es que no se lleve a cabo este tipo de maniobras”, indicó, agregnado que Endesa presentó una propuesta de sistema de control de biomasa.

En detalle, sería una malla que tapa las vías donde ingresa el agua, y que con otro sistema de burbujas impide que entren al ducto los peces, algas y otros recursos marinos.

“Habían varios sistemas que no se estaban llevando a cabo correctamente, revisaron ante notario que la malla estuviera entera, y que el sistema de burbujas estuviera funcionando como corresponde”, declaró, explicando que el agua de mar entra y sale de la planta, algo que está fiscalizando la autoridad.

El otro problema que indican los trabajadores del mar de la zona, es que el agua que saca Bocamina tiene una temperatura más alta de la del ecosistema que hay en ese lugar.

Escucha el testimonio de la autoridad al respecto de este tema en la entrevista realizada por Rodolfo Hahn en Podría Ser Otra Cosa: