Una jueza de la Suprema Corte estadounidense bloqueó la noche del martes una cláusula sobre métodos anticonceptivos de la reforma de salud promovida por el presidente Barack Obama, que obliga a las empresas a garantizar a sus empleados una cobertura médica.

En respuesta a una demanda presentada por una orden religiosa, la jueza Sonia Sotomayor bloqueó esa cláusula de la ley que entra en vigor este miércoles y dio tiempo hasta el viernes por la mañana para que el gobierno presentara sus argumentos.

La anticoncepción, y sobre todo el uso de la píldora del día después, considerada por varios como un aborto maquillado, es uno de los aspectos más criticados de la ley.

Algunos empleadores rechazan financiar aquello que su religión les prohibe.

Para llegar a un acuerdo, el gobierno propuso que para las mujeres que trabajan en organizaciones religosas sin fines de lucro o que se oponen a los métodos anticonceptivos, éstos sean financiados por fuera del seguro de salud que les paga la empresa para la que trabajan.

En cambio esta excepción no se aplicaría a las empresas privadas, cualquiera sea su convicción religiosa, lo cual algunos ya fustigaron.

Dos casos están actualmente ante la Suprema Corte. El de las Hermanas de los Pobres, una orden religiosa de Colorado (oeste), y otros grupos católicos para los cuales se aplica la decisión de la jueza Sotomayor. Y el de una cadena de tiendas de decoración dirigido por un grupo familiar cuyos integrantes quieren realizar sus actividades “en concordancia con sus principios bíblicos”. Estas tiendas están por ejemplo cerradas el domingo, algo excepcional en Estados Unidos.