Concursos abiertos por el Gobierno no corresponden a cargos de “amarre”, según el Intendente del Bío Bío, Víctor Lobos, quien defendió los llamados a pertenecer a la planta funcionaria, pese a que esté terminando la administración actual.

Las jefaturas no responden a cargos de confianza, según corroboró el Intendente del Bío Bío, respecto de concursos públicos que el gobierno promueve y que causan suspicacias, a una semana de las elecciones.

Diversos actores, entre ellos los dirigentes de los mismos funcionarios, plantearon la posibilidad de amarre en cargos para la planta funcionaria de 2014 en adelante, lo que Víctor Lobos, desestima de plano.

En agosto procedió la petición de la Asociación de Funcionarios, según lo dio a conocer el intendente y tras fallidos intentos anteriores en que los concursos fueron anulados, esta vez se mantienen en curso.

La información desde el ámbito de la política apunta a que entre los postulantes figura el actual jefe de gabinete del Intendente, Oscar Aliaga, como concursante de la jefatura del Departamento de Comunicaciones con nivel jerárquico 3, grado 9 con remuneración promedio mensual bruta de 1.722.000 mil pesos.

Además está el ex gobernador de Bío Bío, e intendente transitorio, Renato Paredes, quien postula a la dirección de Administración y Finanzas con nivel jerárquico 3 grado 6 con 2.216.000 mil pesos de remuneración promedio bruto mensual. Este último desestimó su postulación, sin embargo evitó referirse a la materia.

Las situaciones políticas al Intendente del Bío Bío no le extrañan, ni le llaman la atención, debido a que son trabajos técnicos al que cualquier técnico pudiera postular.