La justicia ordenó al Club La Posada devolver la membresía a una socia a quien se le había quitado sus derechos como tal, luego que en medio de un torneo de golf llamara a Carabineros para denunciar la presencia de su marido, quien tiene una restricción en el marco de una denuncia por violencia intrafamiliar.
Evelyn Fredes solicitó la presencia de la policía en las dependencias del club el 24 de agosto pasado, después de ver a su esposo Andrés Barriga, de quien se encuentra separada. Tras confirmar Carabineros la prohibición que tiene el hombre de acercarse a su esposa, dictada por el Juzgado de Familia, fue obligado a abandonar La Posada, que se ubica en el kilómetro 17 de la Ruta 160.
El directorio del club abrió inmediatamente una investigación que terminó con la suspensión de Fredes como socia durante dos meses, atendido el escándalo que ocasionó la presencia policial en el torneo de golf.
La sanción fue objeto de un recurso de protección presentado por Evelyn Fredes, jefa de gabinete de la Seremi de Vivienda, acción que fue acogida a trámite por la Corte de Apelaciones de Concepción, que al mismo tiempo emitió una orden de innovar que repone la membresía hasta el fallo del libelo.
