Marcelo ‘Chino’ Ríos aseguró que no tendría problemas de trabajar con Paul Capdeville, con quien tuvo más de algún roce en el pasado, en este nueva etapa como asistente técnico del equipo chileno de Copa Davis que liderará Nicolás Massú.

En su presentación oficial, quien fuera número 1 del mundo en 1998, se mostró motivado por el trabajo que pueden realizar junto a Massú en pro del tenis chileno y ayudando a las nuevas generaciones.

‘Siempre he tenido la intención de ayudar al tenis, no se me había dado’, comenzó señalando Marcelo Ríos al ser consultado por la motivación que tuvo para afrontar este proyecto.

Asimismo, aseguró que ‘sin desmerecer a los capitanes que había antes, no habían nombrado a uno que me llamara la atención. Supe de Nicolás y me ofrecí para ayudar. No estaban las condiciones para aportar antes’.

Y si bien, largos siete años han pasado desde que el ‘Chino’ dejó el profesionalismo, nunca es tarde para aportar un grano de arena al deporte nacional, aseverando que antes había anticipado que cuando el equipo estuviera enfocado en jóvenes proyectos iba a ayudar, por lo que considera que está cumpliendo su palabra.

‘Vamos a empezar de cero y por qué no tratar de ganar la Copa Davis’, sostuvo un motivado Marcelo Ríos.

Además, añadió que ‘hay un grupo que llama la atención. Sin desmerecer lo que había antes, estar con Nicolás me motiva, estuvo entre los mejores del mundo y es motivante para mí.

Al ser consultado por si Paul Capdeville tendría cabida en el equipo nacional, tomando en cuenta los roces que tuvieron en el pasado, Marcelo Ríos hizo gala de su profesionalismo al señalar que ‘si Capdeville tiene que estar porque está en un buen momento, yo no haré nada para restarlo’.

Eso sí, indicó que existe una conversación pendiente, pero que no tendría que entorpecer el trabajo’.

‘No tengo problemas en trabajar con alguien con quien tuve alguna vez algún roce’, aseguró Marcelo Ríos.

Finalmente explicó que su labor como asistente técnico también está enfocada en el trabajo con los menores, ‘mi idea es sacar juveniles, personas de 13, 14 años y que estén en los mejores del mundo’.