Pese a lamentar los 42 carabineros lesionados durante los incidentes en la conmemoración del golpe de Estado, el presidente Sebastián Piñera efectuó un balance positivo en torno a la labor de control de la policía uniformada.

El mandatario visitó a los funcionarios internados en el hospital institucional, en donde pidió a la ciudadanía entregar antecedentes respecto a quienes protagonizaron los hechos de violencia en el país.

Piñera aseguró que los incidentes los llevaron a cabo “grupos organizados a los cuales se suman delincuentes habituales”, y pidió a la justicia que curse las sanciones correspondientes a los responsables.

“Le pido a los fiscales, a los jueces de Garantía y a los tribunales que cumplan con su labor de impartir justicia, castigar a los violentistas”, fue el emplazamiento del mandatario.

Además, aseguró que el Gobierno recurrirá a los instrumentos que estén a su alcance para perseguir a los responsables de los episodios violentos y las agresiones a Carabineros, de los cuales ocho se encuentran con lesiones de carácter grave.