La ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago, Gloria Ana Chevesich, que fue propuesta por el Presidente de la República para integrar el pleno de la Corte Suprema, y que ha sido cuestionada por sus votos en torno a casos de DDHH, emitió declaraciones en la salida de su exposición ante la Comisión de Constitución del Senado.
Junto con calificar como “muy buena” la disposición de los legisladores frente a su presentación, la jueza se dio el tiempo para responder a la acusación realizada por la Agrupación de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos, cuyos miembros la tildaron de ser “proclive a los genocidas” por su resolución en el caso de Manuel Contreras.
La magistrada precisó que en este caso, en el cual consideró como atenuante la conducta anterior del procesado, la medida se aplica porque previo a 1973 el acusado tenía una conducta proba e irreprochable.
“En artículos del Código se establece la conducta anterior como una atenuante y anterior al año 73 el señor Contreras tenía una conducta proba”, detalló Chevesich, quien añadió que “en los casos concretos que se mencionan, se trata de violaciones a los derechos humanos cometidos entre el 73 y el 86, entonces si hay pruebas que el imputado tenía una conducta proba antes de esa fecha, debía reconocerlo”
Al respecto, la ministra aseguró que en ninguna de las causas en que se investigan graves atentados a los Derechos Humanos cometidos por agentes de Estado aplicó amnistía. “Jamás he aplicado ni la prescripción, ni la media prescripción ni tampoco la amnistía y espero que eso haya quedado claro”, dijo la ministra al salir de la Comisión.
Chevesich sostuvo que ella dicta sentencia de acuerdo al mérito del proceso y previo análisis de la prueba, “ya sea conforme a la sana crítica o la prueba legal”, asegurando que su labor no es dar impresiones, sino dictar sentencias.
Asimismo, sobre las dudas que podrían tener los senadores en torno a este tema, la magistrado explicó que entregó un disco con todas sus sentencias que tuviesen que ver con Derechos Humanos y que la respuesta sobre si ese fallo puede perjudicar o no su designación la deben responder los senadores.
Finalmente Chevesich comentó que no fue consultada por su fallo en el caso Cencosud ni sobre el caso MOP-Gate, pero precisó que fue requerida en relación a si eventualmente las sentencias que se dictan pueden afectar la independencia de un juez, ante lo cual respondió que “todos los jueces tienen que tener la fortaleza moral y espiritual para hacer enfrentamiento a las críticas y cuestionamientos que hagan a sus sentencias pero que uno tienen la obligación de dictar sentencia conforme al mérito del proceso, independiente de la materia de que se trata, independiente de las partes intervinientes”.
La sala del Senado deberá votar el próximo 2 de julio, al retorno de la semana regional en la Cámara Alta, la propuesta del Presidente de la República para integrar la Corte Suprema.
