La Fuerza Aérea de Chile descartó de plano “presiones indebidas” sobre el funcionario que aseguró haber recibido órdenes de retirar estanques de combustible adicional para el fatídico vuelo del CASA 212 que terminó con la vida de 21 personas.
Un nuevo antecedente surgió este jueves en voz del mecánico Luis Torrejón, quien estuvo a cargo de la preparación del avión siniestrado en el archipiélago Juan Fernández en septiembre de 2011. Aseguró que recibió ordenes superiores de retirar el combustible extra que permitía un viaje sin punto de no retorno.
Ante ello, la institución uniformada emitió un comunicado oficial señalando que las declaraciones del Cabo 1° en retiro Luis Torrejón “distan absolutamente del actuar y procedimiento institucional. La Fuerza Aérea de Chile no ha ejercido presiones indebidas sobre este ex funcionario ni ningún otro”.
Respecto al traslado de Torrejón desde Antofagasta a Iquique, la FACh aseguró que ello “sólo respondió a la reasignación de todos los aviones CASA 212 hacia la 1ª Brigada Aérea, lo que necesariamente implicó la destinación de todo el personal de mantenimiento y de apoyo a las operaciones relacionadas con esa aeronave”.
Sobre los cuestionamientos a la cantidad de combustible con que se realizó el vuelo, la institución señaló que “ello fue parte de una investigación muy exhaustiva que estuvo a cargo del ministro en visita Juan Cristóbal Mera, y de las dos investigaciones sustanciadas por la institución”.
Agregó que “todas las investigaciones concluyeron que este accidente no se produjo por falta de combustible, sino por la combinación de condiciones meteorológicas adversas y la baja altura”.
