El incendio que afectó este domingo a una discoteca llena de estudiantes universitarios en la ciudad de Santa María, en el sur de Brasil, dejó al menos 232 muertos y 131 heridos, en la segunda mayor tragedia de este tipo en el país, según el último balance oficial.

“El número de óbitos es de 232, de éstos 120 hombres y 112 mujeres”, la “mayoría asfixiados”, dijo a la AFP Rois Tavares, subcomandante del batallón de operaciones especiales de la policía militar de Santa María, a 300 km de Porto Alegre, en el estado de Rio Grande do Sul.

Esta cifra revisa un saldo anterior de 245 muertos y 48 heridos.

Uno de los sobrevivientes, el joven dentista Mattheus Bortolotto, relató el pánico que vivió: “Fue un horror. Perdí a un amigo muy cercano. Las salidas de emergencia eran insuficientes; perdí de vista a mi amigo en la confusión”, dijo al canal de televisión Band News.

“Una chica murió en mis brazos. Sentí cómo su corazón dejaba de latir. Sólo había visto eso en el cine”, relató.

“Las barreras metálicas utilizadas para organizar las filas de espera bloquearon la evacuación. Las personas se entrechocaban, caían. Ayudé a levantar las barreras. Los bomberos también se intoxicaban con el humo (…) Los que estaban en el fondo de la discoteca quedaron atrapados”, añadió.

Las personas “entraron en pánico y acabaron pisoteándose unos a otros. La principal causa de muerte fue la asfixia”, dijo el jefe de bomberos Guido de Melo a la televisión Globo.

“La seguridad trancó la salida de las personas que estaban en el local y eso causó un gran pánico y un tumulto”, añadió.

Este es el segundo incendio con más muertos en la historia de Brasil, luego del fuego en un circo que dejó 533 muertos en Niterói, frente a Rio de Janeiro, en 1961, recordaron las autoridades.

Una bengala causó la tragedia

Según el jefe de bomberos Guido de Melo, el incendio en la discoteca Kiss se desató por una luz de bengala lanzada por el miembro de una banda de música que se presentaba en el establecimiento. “Usaron una fuente de fuego, de calor, y eso acabó generando la tragedia”, dijo.

“La banda estaba en el palco y comenzó a usar fuegos y de repente, pararon el show y apuntaron el fuego (artificial) al techo. Ahí comenzó el fuego, era leve, pero en cuestión de segundos comenzó a crecer”, relató Michelle Pereira, otra sobreviviente.

El fuego se desató poco después de las 02:00 horas del domingo (01:00 horas en Chile), y fue controlado hacia las 07:00 horas (06:00 horas en Chile).

“Tememos que la mayoría (de las víctimas) sean estudiantes nuestros”, dijo a la AFP el vicerrector de la la Universidad Federal de Santa María, Dalvan Reinert, aludiendo a alumnos de los primeros cursos de las seis facultades de esa institución, que organizaban la fiesta en la discoteca.

El permiso de la discoteca otorgado por los bomberos para operar “está vencido desde agosto” de 2011, indicó el comandante del cuerpo de bomberos de Rio Grande do Sul, Moisés da Silva Fuchs, a la prensa local.

Jóvenes sobrevivientes, algunos con los rostros ennegrecidos por el humo, y familiares de las víctimas aguardaban con angustia la identificación de las víctimas en la puerta del instituto forense de Santa María, una ciudad universitaria de 262.000 habitantes.

La policía pidió a los familiares que lleven fotos de los jóvenes para facilitar la tarea, y pidieron a la población que done sangre.

La presidenta Dilma Rousseff adelantó su retorno de Chile, donde participaba en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE), para visitar el lugar de la tragedia, indicó una fuente de la Presidencia a la AFP.

“Estamos juntos en este momento de tristeza y necesariamente lo vamos a superar”, dijo emocionada la mandataria.

La ciudad de Santa María decretó 30 días de duelo e instaló un equipo de ayuda psicológica para los familiares de las víctimas.

La Universidad Federal de Santa María (UFSM) canceló las clases hasta el próximo miércoles.

El expresidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010), expresó su “solidaridad a los amigos y familiares de las víctimas y a toda la población de la ciudad”. “Todo Brasil está triste y de luto”, añadió.

La tragedia recuerda el incendio en la discoteca República Cromañón en Buenos Aires, el 30 de diciembre de 2004, que dejó 194 muertos y 1.432 heridos.