Tres activistas kurdas fueron encontradas asesinadas la noche pasada de un balazo en la cabeza en los locales de una asociación de la comunidad kurda en el centro de París, indicaron este jueves fuentes concordantes.

La fiscalía de París encargó la investigación a la sección antiterrorista de la policía judicial.

“La escena puede hacer pensar que se trata de una ejecución, pero la investigación tendrá que aclarar las circunstancias exactas” del crimen, precisaron fuentes policiales.

“Tres mujeres fueron asesinadas, sin duda ejecutadas. Es un asunto grave, por eso estoy aquí. Es absolutamente inaceptable”, declaró en el lugar el ministro francés del Interior, Manuel Valls, recalcando la “determinación de las autoridades francesas” a “aclarar totalmente este acto absolutamente insoportable”.

“Mucha gente conocía a la presidenta del centro de información” kurdo, Fidan Dogan, una de las tres víctimas, agregó el ministro.

Fidan Dogan, de 32 años, era asimismo la representante en Francia del Congreso Nacional de Kurdistán, precisó en un comunicado la Federación de Asociaciones Kurdas de Francia.

Según la Federación, las otras dos víctimas son Sakine Cansiz, presentada como “una de las cofundadoras del PKK” (Partido de los Trabajadores de Kurdistán, ilegal en Turquía) y Leyla Soylemez, una “joven activista”.

No bien se dio la información del asesinato, cientos de kurdos se reunieron ante el edificio gritando “Ellas no han muerto”, “¡Somos todos el PKK!”, “¡Turquía asesina, Hollande cómplice!”, y enarbolando banderas con la imagen del dirigente de los rebeldes kurdos Abdullah Öcalan, preso en Turquía.

Leon Edart, responsable de la Federación de Asociaciones kurdas, declaró a la AFP que las tres mujeres estaban solas el miércoles al mediodía en los locales del centro de información, situado en el primer piso del edificio, situado en el distrito X de París y equipado con un dispositivo electrónico de acceso mediante código.

BALAZO EN LA NUCA

Al final de la tarde, un miembro de la comunidad trató de contactarlas en vano. Trató de entrar en el centro, pero no tenía las llaves y no pudo entrar inmediatamente.

Según la Federación de Kurdos de Francia, amigos de las víctimas, preocupados, se trasladaron al lugar y vieron trazas de sangre en la puerta, por lo que decidieron echarla abajo y descubrieron entonces los tres cadáveres hacia la una de la madrugada del jueves.

Dos de las mujeres habrían sido asesinadas de un balazo en la nuca, la tercera presentaba heridas en el vientre y en la frente, según la misma fuente.

En el edificio ninguna placa señala la presencia del centro de información kurdo. Según Leon Edart, las víctimas le abrieron quizá la puerta al o a los asesinos.

La Federación de Asociaciones Kurdas de Francia exhortó a los kurdos de Europa a “reunirse en París para denunciar este ataque”.

En varias oportunidades, la justicia francesa investigó en el pasado asuntos que implicaban a la comunidad kurda, en particular casos de financiamiento del PKK a través de extorsiones o del cobro de un “impuesto revolucionario”.

Estos asesinatos se producen en momentos en que, según la prensa turca, Ankara y el dirigente kurdo preso Abdullah Öcalan se pusieron de acuerdo sobre un cese de las hostilidades, que duran desde 1984.

En Francia, los kurdos representan una población de unas 150.000 personas, casi el 90% de las mismas originarias de Turquía, según un estudio realizado en 2006 por Rusen Werdi, del Instituto Kurdo de París.