A un mes de haber entrado comercialmente en operaciones, la central termoeléctrica Bocamina II de Endesa, ha presentado dos fallas y se encuentra actualmente fuera de operaciones en Coronel. Esto significó que el costo marginal de la energía se elevó en noviembre un 24%.

La cartera de energía pidió a Endesa un detallado informe sobre el incidente reportado el 19 de noviembre, y que tuvo a la central fuera de servicio durante 10 días, sólo tres semanas después de haber ingresado de manera formal al sistema interconectado central.

Se habría tratado de una rotura de los tubos de la caldera, que obligó a que el sistema eléctrico tuviera que recurrir a energía de respaldo generada con diesel que tiene mayores costos de operación.

Una vez superado el problema, sólo alcanzó a estar operativa algunos días, porque este lunes volvió a salir de funcionamiento.

Rodrigo Torres, Seremi de Energía de la región del Bío Bío, dijo que las centrales nuevas presentan habitualmente fallas en sus primeros meses de operaciones, pero en este caso han pedido un informe a Endesa para saber de qué se tratan los problemas que ha tenido Bocamina II de Coronel.

Después de estar más de 5 meses en marcha blanca, período que coincidió con una serie de movilizaciones emprendidas por vecinos y pescadores en contra de la central, la termoeléctrica a carbón entró en operación comercial el 28 de octubre.

Produce 350 megawats de energía, lo cual elevaría un 6,2% la capacidad instalada de Endesa, sin embargo el esperado alivio al frágil sistema eléctrico no se ha visto a poco más de un mes de su inicio de operaciones.

Por el contrario, según datos del centro de despacho económico de carga del sistema interconectado central, los costos marginales de la energía se elevaron un 24 en noviembre producto de la falla de Bocamina II y la sequía que afecta a la zona centro sur del país.