Siete de los presos que hace dos semanas escaparon de la cárcel de Piedras Negras, norte de México, fueron detenidos por militares en una vivienda de otra ciudad fronteriza con Estados Unidos, informó este lunes la secretaría de la Defensa, con lo que 114 presos siguen prófugos.
En la operación “se logró la detención de siete delincuentes fugados” en cumplimiento de “trabajos de búsqueda y explotación de información” en una zona habitacional de Nuevo Laredo, vecina de la estadounidense Laredo (Texas), añadió el texto.
Hasta el momento han sido recapturados 16 reos y uno más fue abatido al momento de ser detenido.
Según las primeras indagatorias, la fuga de 131 reos el pasado 17 de septiembre, una de las más numerosas que se han registrado en México en los últimos años, habría sido organizada por el cártel de Los Zetas, que consiguió incluso que la mayoría de evadidos salieran por la puerta principal del penal.
Tras la fuga, unos 5.000 policías y militares fueron desplegados en Coahuila y los estados vecinos de Tamaulipas, Nuevo León y Zacatecas (norte), donde tienen fuerte presencia los Zetas, considerado uno de los cárteles más poderosos y sanguinarios de México.
El gobierno del estado de Coahuila, ha señalado que Los Zetas realizaron la fuga para fortalecer sus filas.
