El jefe de las fuerzas de paz de las Naciones Unidas, Herve Ladsous, afirmó este martes que el conflicto en Siria escaló al nivel de guerra civil.

Consultado sobre si estimaba que Siria se encontraba en guerra civil, Ladsous afirmó a un pequeño grupo de periodistas: “Sí, creo que podemos afirmar eso. Claramente lo que está sucediendo es que el gobierno de Siria perdió gran parte de su territorio, varias ciudades frente a la oposición, y quiere retomar el control”.

“Hay un aumento importante del nivel de violencia”, precisó Ladsous.

Al menos 36 personas murieron en enfrentamientos en Siria este martes, según el Observatorio Sirio para Derechos Humanos.

Las fuerzas del régimen de Bashar al Asad lanzaron obuses contra bastiones rebeldes en la provincia de Deir Ezzor en el este del país, en la de Alepo en el norte y en varios puntos de la provincia de Homs, en el centro.

Al menos 120 personas murieron en otros enfrentamientos en Al-Haffe la semana pasada, incluyendo 58 soldados, 29 civiles y 23 rebeldes, a los que se suman cientos de heridos, según el Observatorio.

Soldados del régimen incrementaron sus ataques en el ciudad de Homs y sus suburbios, contra posiciones rebeldes.

La violencia a través del país se saldó el lunes con la muerte de 111 personas, de las cuales 79 civiles.

Más de 14.100 personas murieron, la mayoría civiles, desde el comienzo de la revuelta en oposición al régimen sirio en marzo de 2011, según el Observatorio.