El ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega, internado el domingo en un hospital por problemas de hipertensión, se encuentra “estable” pero seguirá allí para realizarle más pruebas médicas, informó este miércoles el Ministerio de Salud (Minsa).

El “estado de salud de Noriega es estable”, pero aún hay que practicarle algunas pruebas, por lo que no podrá salir este miércoles como estaba previsto, informó el Minsa en un comunicado.

Hay que practicarle aún un encefalograma, un ultrasonido para buscar coágulos de sangre u otros problemas con el flujo sanguíneo, y debe ser revisado por un cardiólogo, señalaron las autoridades.

Según sea el diagnóstico, “posiblemente le den salida este jueves”, añade el comunicado.

Noriega, que cumple 78 años el sábado, está internado en el hospital Santo Tomás de la capital panameña desde el domingo, adonde fue trasladado desde su celda en el Centro Penitenciario El Renacer, a orillas del canal de Panamá, tras desvanecerse.

Según reportes policiales, el ex dictador ingresó al hospital con “un cuadro de hipertensión con posibilidad de un derrame cerebral”.

El pasado lunes el ministro de Salud, Franklin Vergara, aseguró que Noriega estaba “consciente y bien orientado” y que “podría” estar padeciendo “una enfermedad vascular transitoria”.

“No hemos tenido acceso a ver los informes y los resultados, lamentablemente no puedo decir mucho”, dijo Thays Noriega, una de sus tres hijas, a la salida del hospital.

Noriega, que gobernó de facto Panamá entre 1983 y 1989, retornó el 11 de diciembre extraditado desde París, tras cumplir 21 años de cárcel en Estados Unidos y Francia por narcotráfico y lavado de dinero.

El ex dictador, derrocado el 20 de diciembre de 1989 por tropas de Estados Unidos que invadieron Panamá, cumple en El Renacer (25 km al noroeste de la capital) tres condenas de 20 años cada una por la desaparición de opositores.

Las víctimas de su régimen temen que pueda verse beneficiado con una ley que establece que los reclusos mayores de 70 años pueden cumplir sus penas en casa o por alguna medida cautelar debido a su estado de salud.

“No hemos pensado en eso. Estamos pensando en la salud de él y su estabilidad médica. Eso es lo importante para nosotros”, afirmó su hija.

Noriega, que también fue agente de la CIA, tiene una citación para presentarse en marzo ante un juez en un proceso por el homicidio de un estadounidense en 1969.