Son cerca de 25 mil las hectáreas consumidas por el incendio en el foco Pichiqueime de Quillón-Florida, y 222 viviendas destruidas, producto del incendio forestal en la provincia de Ñuble.

De esto se dio cuenta en el último Comité de emergencia que se desarrolló en la intendencia del Bío-Bío, den el que además se confirmó que el Subsecretario de Agricultura, Álvaro Cruzat, decretó Zona de Emergencia Agrícola para 3 comunas de la Región del Bío-Bío. Se trata de Florida, Quillón y Ránquil las que se han visto principalmente afectadas con el fuego.

La solicitud la hizo durante la mañana de ayer el Intendente del Bío-Bío, Víctor Lobos, mediante la seremi de Agricultura. Esto luego de recopilar antecedentes que daban cuenta de las consecuencias que el siniestro ha generado en el sector. Con la medida se liberarán fondos que irán en beneficio de los pequeños y medianos agricultores de la zona que perdieron su principal fuente de trabajo y subsistencia.

Durante la jornada, también el Ministro de Agricultura, Luis Mayol, se pronunció al respecto, y reconoció que la situación que enfrenta el sector es grave y que no sólo la región del Bío-Bío había pedido la declaración.

Con el decreto, al menos 300 agricultores recibirán bonos de emergencia agropecuaria y de reparación de infraestructura productiva, que en total alcanzará los 360 millones de pesos aproximadamente.

También, se dio inicio en la región el Catastro de Damnificados, para identificar a todas las personas que perdieron su vivienda a raíz del incendio, y que podrán optar a un subsidio de 500 UF. Eso sí, deben tener como requisito el certificado de inabitabilidad y acreditar que poseen una única propiedad, ya que este subsidio deja afuera a los doble propietarios.

El catastro se inició en la comuna de Ránquil, en el sector de Carrisales a unos 3,5 kilómetros de Nueva Aldea. Y la primera en inscribirse fue una mujer de 80 años que por segunda vez perdió su casa: primero para el terremoto, por lo que recibió una vivienda recién el pasado 29 de diciembre, la misma que perdió 3 días después con el incendio.

Dirigiendo la actividad estuvo el Ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez Mackenna, quien explicó que habrá un equipo en terreno para inscribir a los damnificados, en un plazo de 30 días. Posterior a esto, esperan que en marzo comience el proceso de construcción de las viviendas, para que al segundo semestre ya estén entregadas.

Otro de los hechos que marcaron la jornada de ayer, fue la reapertura de la autopista del Itata, que estuvo cerrada varios días por la cercanía del fuego. Se abrió desde las 8 de la mañana, hasta las 20 horas, y se espera que hoy se repita la misma restricción sin cobro de peaje.

En torno a la propagación del fuego el comité de emergencia informó que el incendio ha disminuido su intensidad, de hecho el intendente dijo ayer a La Radio, que si las condiciones del tiempo hoy se mantienen como ayer, con vientos menos fuertes y temperaturas más bajas, podría llegar a controlarse la situación durante esta jornada.

De todas formas continúa el trabajo de los brigadistas, ayer ingresaron 260 voluntarios más del Ejército, la Conaf y Bomberos, que enfocaron las labores especialmente en Ránquil y Santa Ana, donde se concentró el fuego en las últimas horas amenazando con propagarse a lugares como Coelemu o Rafael.

Para hoy se espera la llegada del fiscal nacional Sabas Chahúan a la región, para reunirse con los fiscales de Bulnes, donde se está llevando la investigación para determinar y encontrar a los posibles responsables del incendio.