Centenares de indígenas que marchan contra una carretera en la Amazonía llegarán a La Paz la próxima semana para no cruzarse con una inédita elección para autoridades judiciales en Bolivia que se realizará el domingo, mientras que otra oficialista arribará en las próximas horas a la sede de gobierno.

“Estaremos en La Paz la próxima semana entre el martes y miércoles para que el gobierno no diga que queremos afectar las elecciones”, dijo por teléfono a la AFP Miguel Charupa, dirigente del comité de los marchantes, tras los temores oficialistas de que los nativos estarían en la sede de gobierno en vísperas de los comicios judiciales.

“No tenemos ningún apuro de llegar a La Paz”, agregó.

Unos 5 millones de bolivianos están llamados a participar el domingo para elegir por voto popular a 56 autoridades de la Corte Suprema, el Tribunal Constitucional y otras instancias del poder Judicial.

El presidente Evo Morales, un indígena de tendencia izquierdista, había denunciado días atrás que los nativos intentaban perjudicar el proceso electoral.

Los amazónicos comenzaron a mediados de agosto a marchar desde un poblado a 600 km al noreste de La Paz y ahora se encuentran en una zona a unos 70 km de la sede de gobierno. El gobierno intentó vanamente, con el uso de policías, dispersar la protesta hace dos semanas.

“Somos unos 2.000 que estamos marchando en contra de la carretera” de 300 km que Morales quiere construir en el territorio indígena TIPNIS, en el centro del país, y rico en flora y fauna, afirmó el dirigente Charupa.

Esta caminata llegará a La Paz por el norte, mientras que otra por el sur, de campesinos y cocaleros oficialistas, espera arribar a la capital desde los Andes el miércoles para manifestar apoyo al presidente Morales y respaldar el proceso electoral judicial.

También son centenares, y se encuentran a unos 50 km de distancia, en una marcha que comenzó el viernes de la semana pasada para oponerse a la protesta de los nativos amazónicos.