Las exportaciones chinas alcanzaron en abril el monto récord de 155.700 millones de dólares, lo que permitió al primer exportador mundial generar un excedente comercial de 11.400 millones de dólares, anunció este martes el Servicio de Aduanas chino.

Las exportaciones crecieron en abril un 29,9% respecto al mismo mes del año anterior. Las importaciones aumentaron un 21,8% para alcanzar 144.300 millones de dólares, precisó la fuente.

El excedente es resultado de “importaciones más débiles debidas a los precios más bajos de las materias primas y a una demanda menor en China”, declaró a la AFP Ken Peng, economista en Citigroup, que espera “un excedente aún más importante en mayo”.

China registró un déficit comercial de 1.020 millones de dólares en el primer trimestre. Sin embargo, el resultado de abril le permite obtener un excedente en los primeros cuatro meses del año, de 10.300 millones de dólares, inferior en un 32,8% al del mismo periodo de 2010.

“Tras una anomalía en el primer trimestre, las cifras del comercio chino han vuelto a (…) un fuerte excedente en abril, burlando las expectativas de un reequilibrio rápido de la economía china”, comentó Alistair Thornton, economista de IHS Global Insight, desde Pekín.

En el marco del 12º Plan Quinquenal (2011-2015), aprobado en marzo, el gobierno chino quiere que la segunda potencia económica mundial sea menos dependiente de las exportaciones y que aumente la demanda interna.

Los importantes excedentes comerciales de China contribuyen a la acumulación masiva de reservas internacionales por parte de Pekín. Las reservas superaron este año los 3 billones de dólares, alimentando una inflación que se ha acelerado en los últimos meses.

Las cifras del comercio exterior chino han sido publicadas coincidiendo con la celebración en Washington del Diálogo Estratégico y Económico (SED) entre China y Estados Unidos, que instó el lunes a un reequilibrio de la economía china en favor del consumo interno.

Washington insiste en que el yuan debe reevaluarse, argumentando que su débil tasa de cambio, fijada a diario por el banco central chino, da una ventaja competitiva artificial a los exportadores del país asiático.