El gobierno griego previno este lunes que no continuará financiando a las ligas de fútbol profesional la próxima temporada si la federación helena no consigue detener la la violencia que sacude a este deporte en el país.

“Hemos pedido a la federación que modifique el código disciplinario en su próxima asamblea general y si no se hace, el Estado suspenderá toda financiación a las ligas de fútbol profesional”, declaró Giorgos Nikitiadis, ministro de Cultura y Turismo, en el que está encuadrado el deporte.

“Debe haber disposiciones contra los cohetes y los petardos y contra los aficionados que penetren en el terreno. ¿Por qué deberíamos financiar un deporte que causa vergüenza?”, añadió el ministro.

Nikitiadis estima que debería haber sanciones que puedan ir hasta la exclusión de los equipos del campeonato y, desde junio, el gobierno presentará un proyecto de ley en ese sentido.

Según el ministro, unos 2.500 hooligans en todo el país están en el origen del problema.

El ministro se reunió este lunes con el presidente de la federación de fútbol, Sophocle Pilavios, para discutir medidas a tomar contra la violencia en los estadios, después de los incidentes ocurridos el sábado en la final de la Copa de Grecia, ganada por el AEK de Atenas contra Atromitos, donde 13 personas fueron detenidas.

En ese partido, hooligans invadieron el césped y tuvieron lugar enfrentamientos en el exterior del estadio olímpico antes y después del partido. Según las autoridades, 22 policías resultaron heridos.