El centrocampista brasileño del Real Madrid Kaká, que jugó el lunes sus primeros minutos con el equipo tras recuperarse de una lesión en una rodilla, admitió que llegó a temer por no poder volver a jugar al fútbol, en declaraciones a la web del club.

Kaká, operado en la rodilla izquierda en agosto, saltó al campo en el minuto 75 del partido ganado por el Real Madrid en Getafe (3-2), válido para la 17ª jornada de la Liga.

“En algunos momentos tuve miedo de pensar cuándo iba a volver a jugar y si volvería a hacerlo. Ahora tengo que hacerme con mi espacio, porque el equipo está a un gran nivel. Pero la competencia siempre es buena”, comentó el astro brasileño.

“Estoy muy feliz por volver a jugar un partido y estar sobre el campo. Además, reaparecer con victoria es lo mejor que me podía pasar”, señaló.

El Balón de Oro de 2007, de 28 años, no había vuelto a jugar desde la derrota de Brasil en cuartos de final del Mundial-2010, ante Holanda (2-1).

“He pasado por momentos muy difíciles. Lo que más he echado de menos son los detalles: estar en la concentración, poder entrenarme, estar juntos en el vestuario, poder jugar con la afición ahí”, explicó.

“Me faltaba la alegría de jugar. Estoy disponible y voy a dar el máximo para volver a hacerlo con mucha felicidad”, añadió.

Kaká llegó al Real Madrid en 2009 procedente del Milan, por 65 millones de euros. Hasta ahora no ha conseguido brillar como se esperaba y tiene un serio competidor en el alemán Mesut Özil, que llegó al club antes de la actual temporada, desde el Werder Bremen y tras un gran Mundial-2010 en Sudáfrica.