Por primera vez, uno de los jóvenes que denunció haber sido víctima de abusos sexuales de parte del sacerdote Audín Araya, Director del Colegio Salesiano de Concepción el año 2008, rompió el silencio en Radio Bío-Bío.

Cuatro son las denuncias concretas de afectados, presentadas ante la Fiscalía de Concepción, que apuntan contra el sacerdote Audín Osvaldo Araya Alarcón, director del Colegio Salesiano en el período 2008.

Las acusaciones contra el religioso tienen relación con presuntas prácticas abusivas tales como tocaciones de carácter sexual a estudiantes, en jornadas pastorales. Uno de los afectados, Juan Pablo Medina, corrobora estos hechos y asegura que en su caso Audin Araya lo tocó en sus genitales en más de una oportunidad, en solitario y también junto a uno de sus compañeros.

Tras los primeros indicios que apuntaban a que el cura habría cometido abusos contra algunos de sus estudiantes, particularmente jóvenes con inclinación futura de sacerdocio, la Congregación decidió relegarlo de sus funciones, medida que en su momento tranquilizó a la comunidad escolar.

Sin embargo los afectados recurrieron a la justicia cuando Araya apareció ejerciendo en otro colegio de la orden, esta vez, en Puerto Montt. Así lo aseguró Medina, quien presentó la cuarta denuncia contra el religioso en noviembre pasado y aseguró que no lo hizo antes por temor.

Según el ex alumno la órden Salesiana fue advertida por los alumnos. Incluso, el inspector nacional de la Congregación Padre Leonardo Santibáñez, viajó desde Santiago a Concepción para escuchar su denuncia, sin embargo no encontró apoyo.

El sacerdote Audín Araya, estuvo en Bogotá (Colombia) , enviado por la propia congregación, pero ya está de regreso en Santiago. Así lo confirmó su abogado particular, Marcelo Torres Duffeau, el mismo que defendió a Bruno Betanzo en el caso Matute.

El litigante, pese a evitar dar declaraciones insiste fuera de micrófono que le cree a su cliente “y él se declara inocente”. Agrega que los relatos de los jóvenes presentan inconsistencia.

Desde Santiago y a través de su periodista, el sacerdote Leonardo Santibáñez, que oficia de director nacional de los hijos de Don Bosco, se rehusó a dar entrevistas, pero vía comunicado de prensa confirmó que el cura fue sometido a un tratamiento que no determinó características anormales en su comportamiento.

El director del establecimiento penquista Padre Juan Angel Ibáñez también declinó dar entrevistas.