La célebre actriz de cine Sofía Loren cautivó el domingo por la noche al público de la televisión italiana con un filme sobre su vida, en el que interpreta a su propia madre, la mujer que forjó su carrera de diva mundial.

Sofia Loren en su juventud

Con seis millones y medio de televidentes y con el título “Mi casa está llena de espejos”, el filme, basado en el libro homónimo escrito por la hermana de la actriz italiana, Naria Scicolone, obtuvo la mayor audiencia del domingo, pero sin alcanzar un récord como se esperaba.

La producción del canal público RAI, repartida en dos episodios, narra la vida de la actriz desde su niñez en los barrios bajos de Pozzuoli, en las afueras de Nápoles, hasta 1961, momento en que Sofía Loren consiguió el Oscar por “Dos mujeres”, dirigida por Vittorio De Sica y que la convirtió en un icono sexual de la época.

Loren, de 75 años, que comenzó su espectacular carrera como simple figurante en la superproducción “Quo vadis” (1950), eclipsó a su compañera de reparto, la joven modelo siciliana Margareth Madé, quien debutó el año pasado con el filme “Baaria” de Giuseppe Tornatore (2009), quien la interpreta cuando era joven.

La historia de la madre de Sofia, Romilda Villani, narrada con tono melodramático, es típica de la mujer de mitad del siglo XX, a la que la familia le impidió seguir la carrera de actriz y que sufrió la pobreza, el abandono del padre de sus hijos y la frustración de los propios sueños.

“Mi vida ha sido un cuento de hadas maravilloso, una historia de guerra, hambre, mendicidad, que fue lo que mi madre hizo por nosotras: luchó para dar a sus hijas un nombre y un futuro que no fuera la miseria”, dijo entre lágrimas, al presentar la producción, cuya segunda parte será transmitida el lunes.

El filme narra también cuando Loren se enamoró del millonario productor Carlo Ponti, con el que se casó en 1966 y permaneció toda su vida, hasta su fallecimiento en 2007.