El ministro del Interior subrogante, Patricio Rosende salió al paso ante las críticas por los supuestos “amarres” de cargos públicos y desmiente que existan indemnizaciones para los funcionarios de confianza que dejarán sus puestos, y aclaró que no hay indemnizaciones para los funcionarios públicos cuyos contratos rescindan el 11 de marzo, aunque éstos expiren el 31 de diciembre de 2010.

Lo anterior, en el marco de la discusión administrativa surgida a raíz del cambio de Gobierno y sobre la permanencia de quienes desempeñan labores denominadas de “confianza” de la autoridad política respectiva.

Rosende, dijo además que la administración del presidente electo Sebastián Piñera recibirá todo en orden para que pueda desarrollar sus tareas de Gobierno como corresponde.

En relación a esta materia, el presidente subrogante de la ANEF, Bernardo Jorquera, precisó que efectivamente los funcionarios de confianza deberán renunciar antes que asuma el nuevo Gobierno.

Agregó que en relación al personal a contrata, que son cerca de 47 mil, estos no podrán ser despedidos sin una evaluación acorde a los procedimientos

Jorquera precisó además que existen unos 600 cargos no políticos, escogidos mediante la Alta Dirección Pública, los cuales, dijo, no pueden ser desvinculados del Gobierno.