El Ministerio de Agricultura constató que durante la última semana del año las carnes de vacuno presentaron las mayores diferencias entre sus precios mínimos y máximos, de acuerdo al estudio realizado a través de la Unidad de Consumidores de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa).
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Ejemplo de ello fue el valor del kilo de asado carnicero, cuyo costo fluctuó con una diferencia del 88%, vendiéndose entre los $4.490 y $2.390.
En la misma línea, el kilo de huachalomo y sobrecostilla mostró una fluctuación del 84%. Ambos cortes se vendieron a $4.390 en supermercados del sector oriente y a $2.390 en establecimientos del sector sur y poniente de Santiago.
Por su parte, los precios extremos de la posta negra, rosada y paleta observaron una oscilación del 75%. Los tres cortes se transaron a $4.698 en carnicerías de la zona oriente y a $2.690 en supermercados del sector norte.
En cuanto a carnes de cerdo, la pulpa sin hueso mostró la mayor brecha entre su valor máximo y mínimo, con un 66%. El kilo se transó entre $3.990 en el retail de la zona oriente y $2.398 en carnicerías del sector norte.
En carnes blancas, el kilo de pechuga de pollo presentó una fluctuación equivalente al 68% entre sus precios extremos. El valor más elevado se encontró en supermercados ubicados en las zonas poniente y norte, donde se transó a $2.690, mientras que el más bajo se registró en carnicerías del sector norte a $1.598.
En términos generales, los supermercados concentraron los precios más convenientes en carnes de vacuno, al contrario de las carnicerías, que venden a menor valor promedio los cortes de pollo y cerdo.
Por otra parte, al comparar los valores promedio de la semana anterior con la actual, se evidencia una baja en la mayoría de los productos cárnicos ofertados en supermercados.
El kilo de asado carnicero descendió 16%, dado que en el sondeo anterior se pudo encontrar en promedio a $3.829, mientras que en el presente se vende a $3.208.
En este mismo punto de venta la posta negra disminuyó un 14% y la posta rosada un 10%. El kilo del primer corte bajó de $3.806 a $3.263 y el segundo de $3.916 a $3.516.
En el caso de las carnicerías, se mantuvieron los precios promedio de los distintos tipos de carne, con excepción de la pulpa de cerdo con hueso que mostró un alza del 9%. Entre un monitoreo y otro, el kilo subió de $2.197 a $2.397.
