Por el delito de almacenamiento de material pornográfico infantil fueron formalizados seis sujetos que pertenecían a una red de, al menos, 25 comunidades virtuales dedicadas a la distribución de pornografía en varios de países de Sudamérica.
Se trata de Luis Torres, Milton Moya, Cristóbal Nery, Carlos Esparza y Mario Pavez, todos de Santiago, a excepción de César Vergara oriundo de Los Ángeles.
Según los antecedentes aportados por la Fiscalía Centro Norte, esta investigación comenzó el año 2006 por una denuncia del Segundo Juzgado del Crimen. A raíz de ello, se pudo determinar la participación de chilenos en comunidades de distribución de pornografía infantil.
El fiscal a cargo de la investigación, Marco Mercado, dijo que tras realizar varios allanamientos se encontró abundante material pornográfico, entre ellos fotografías y videos de abusos contra menores.
El jefe de la Brigada del Cibercrimen de la Policía de Investigaciones, el comisario Jaime Jara, señaló que según la línea de investigación hay serias sospechas sobre abusos de menores efectuados por uno de los imputados. Sin embargo, aún no es posible entregar más detalles.
A diferencia del resto de los imputados, Mario Antonio Pavez fue formalizado por almacenamiento y distribución de material pornográfico infantil, por lo que arriesga penas desde 3 años y un día a 5 años de presidio menor en su grado máximo.
Los imputados fueron puestos en libertad, con arraigo nacional y deberán firmar una vez al mes mientras duren los tres meses de investigación, según lo decretó el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.
