Ad portas de la votación en el Concejo Municipal de Concepción de la ordenanza antidiscriminación, crecen las diferencias y aumenta la presión entre las agrupaciones de la diversidad y el mundo cristiano de la región del Bío Bío, quienes se oponen de manera férrea a la aprobación de esta iniciativa.
Esteban Guzmán, vocero del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, afirmó que esta ordenanza tiene como objetivo prevenir y sancionar la discriminación arbitraria en cualquiera de sus formas, tanto hacia minorías sexuales y discapacitados, como por ideología, raza o religión.
Guzmán afirmó que el mundo cristiano del Bío Bío está utilizando este tema con fines electorales.
Para Paulina Cabrera, del Movimiento “Euforia de Género”, es incomprensible que sean los propios evangélicos quienes rechacen una ordenanza antidiscriminación.
Uno de los puntos críticos de esta discusión es que esta iniciativa propone que los niños transgénero sean inscritos con su nombre “social” en los colegios.
María José Sazo es madre de Javier, quien de manera biológica nació como una niña, pero no se identifica con el género que le fue asignado. La mujer pide que se garantice el respeto a los menores en esta situación.
Algunos concejales de Concepción -como el comunista Álex Iturra, Sebastián Morales y Fabiola Troncoso de la DC- hicieron un llamado a no obstaculizar esta ordenanza y a no utilizar esta iniciativa para conseguir votos.
Esto, en directa relación a la candidatura de Héctor Muñoz (RN), miembro del Consejo de Pastores del Bío Bío, quien aseguró que votará en contra de este proyecto, ya que sostuvo que no se incluyó al mundo cristiano en la discusión.
Mientras tanto, el “ala conservadora” del Concejo se mantiene indecisa frente a esta ordenanza. Por lo tanto, es posible que este bloque rechace o solicite que se postergue la votación de esta iniciativa, programada para este jueves 5 de mayo.
