Jake Lloyd (27), el actor que interpretó a Anakin Skywalker de niño en la cinta Star Wars: La amenaza fantasma fue diagnosticado con esquizofrenia.

Así lo informó el portal de espectáculos TMZ, donde recuerdan que en junio del año pasado el joven fue detenido tras protagonizar una persecución a alta velocidad en Carolina del Norte luego de evadir un control policial. En la ocasión, Lloyd arrancó, alcanzando los 160 km/hr.

Lisa Lloyd, madre de Jake, confirmó al medio mencionado que ahora su hijo fue trasladado desde la cárcel a un centro psiquiátrico después del diagnóstico médico.

“Lisa nos cuenta que las autoridades llegaron a la conclusión de que necesitaba más ayuda que castigo, debido a que sufre de esquizofrenia”, explicaron en TMZ.

La mujer también señaló que desde que fue llevado a ese recinto, el actor ha tenido mejoras en su salud mental.

Según el reporte, no habría un plazo para la estancia de Lloyd en el centro psiquiátrico, ya que la familia prefiere que se tome el tiempo necesario para recuperar su salud.

Tal como señala la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos, la esquizofrenia es “un trastorno mental que dificulta diferenciar lo que es real de lo que no”.

“También dificulta pensar con claridad, tener respuestas emocionales normales y actuar de manera normal en situaciones sociales”, añade el organismo, señalando que “las personas con esquizofrenia pueden tener dificultad para conservar amigos y para trabajar. También pueden tener problemas de ansiedad, depresión y pensamientos o comportamientos suicidas”.

Jake en la actualidad | Foto policial

Jake en la actualidad | Foto policial

Recordemos que Jake saltó a la fama en 1999 cuando sólo tenía 10, lo que según explicó en entrevistas posteriores, no fue una experiencia del todo positiva para él.

Tras el estreno de la cinta, el menor de edad disfrutó de los beneficios de fama por un periodo corto de tiempo, ya que los problemas comenzaron a llegar cuando tuvo que soportar el acoso de sus compañeros de clases y el estrés que le provocaba tener que responder a tantas obligaciones sin tener la madurez necesaria.

“Mi vida escolar entera fue en realidad un infierno – y tenía que hacer como 60 entrevistas al días”, comentó al diario The Daily Telegraph en 2012.

Por este motivo destruyó todos los recuerdos que tenía de su participación la saga, dejó la actuación en 2001, y se centró en sus estudios.

Tras terminar el colegio, trabajó en un centro comercial en Carmel, Indiana y luego pasó su tiempo como jugador de hockey en las ligas menores para el equipo Canucks de Jour.