El miércoles se conoció la denuncia de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) en contra de Cencosud, Walmart y SMU, las tres principales cadenas de supermercados del país, por fijar precios en la venta de carne fresca de pollo.

Según se indicó los supermercados pertenecientes a las cadenas denunciadas son Jumbo y Santa Isabel, de Cencosud; Unimarc, Mayorista 10, Maxi Ahorro, Alvi, Dipac y Comer de SMU; Hipermercado Líder, Líder Express, SuperBodega Acuenta y Ekono de Walmart.

En el requerimiento se señala que éstas “han participado de un acuerdo o práctica concertada destinada a fijar, por intermedio de sus proveedores, un precio de venta para la carne de pollo fresca en supermercados que fuera igual o superior a su precio de lista mayorista”, lo que ocurrió entre 2008 y 2011.

Cabe destacar que esta denuncia fue realizada tras las indagatorias del caso de la colusión de Ariztía, Agrosúper y Don Pollo.

En tanto se indicó que la defensas de las cadenas involucradas se enfocarán en determinar quiénes son los verdaderos protagonistas de este caso de colusión.

De acuerdo a lo consignado en el informe presentado por la FNE ante el TDLC, las empresas consideran que tanto los consumidores como los mismos supermercados, son los mayores perjudicados.

A juicio de la defensa de las empresas denunciadas, el documento emanado en el marco de la investigación del denominado caso pollos, denominado “Estimación de los daños económicos generados por la colusión de la industria del pollo en Chile”, sustentaría sus dichos respecto a la responsabilidad por este caso, tal como consigna La Tercera.

Según las empresas sostienen que los correos electrónicos que forman parte de los antecedentes de la denuncia, ratificarían que las compañías productoras de pollos eran las que manejaban la industria.