Amenazando con llegar hasta las últimas consecuencias y declarándose en estado de alerta, trabajadores portuarios de Valparaíso informaron que denunciaron ante la Contraloría General de República al intendente Ricardo Bravo por su presunto actuar negligente en el marco del denominado Servicio de Cargas Limpias que norma la importación de mercaderías por el Puerto de Valparaíso.

Sergio Baeza, presidente de La Confederación de Trabajadores Portuarios de Chile, Cotraporchi, explicó que junto a Roberto Rojas de La Confederación Marítima de Chile, Comach, hicieron entrega del documento que da cuenta del actuar que tuvo el intendente, donde impuso una disposición a particulares, según ellos, al margen de la Ley y sin contar con facultades para dicho acto.

El dirigente portuario, indicó que lo que habría impuesto Bravo es que se guarden las cargas en el Zeal y no en el puerto, lo que significa un costo adicional del orden de los 2.700.000 dólares que deberá cancelar cada cliente o consignatario a favor de Zeal al mes.

Respecto a ello, la máxima autoridad regional afirmó que el servicio de Cargas Limpias es algo que no impuso él y que está vigente hace 2 años como resultado de un acuerdo asumido entre los distintos actores que operan en el puerto, vale decir, la Cámara Aduanera, los agentes de aduana, TPS, EPV, ZEAL, SAG y la propia Aduana; quienes, afirmó, son los que no se han puesto de acuerdo en quién debe asumir este costo adicional que se genera.

Pese a esta aclaración, el presidente de Contraporchi señaló que permanecen a la espera del pronunciamiento del contralor Ramiro Mendoza, mientras que de no obtener una respuesta favorable, el próximo paso será la Fiscalía Nacional Económica y el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia; no descartando nuevas manifestaciones.