Estamos a días de la Navidad, y aunque muchos nieguen que los regalos no son el verdadero sentido de esta celebración, al final caemos en el estrés de las compras igual.

Por lo general dejamos para última hora la compra de regalos y aunque le pongamos empeño, googlemos y pasemos horas buscando el presente “ideal”, corremos el riesgo de que el ticket de cambio sea utilizado y nuestro esfuerzo sea devuelto a la tienda.

Lee también: 10 regalos que debes evitar dar para el amigo secreto

Y aunque sea “la intención lo que cuenta” El País, entregó siete consejos, avalados por estudios de psicología del consumidor, para poder acertar con nuestros regalos navideños.

Realizar una lista

Según un estudio publicado en el Journal of Experimental Social Psychology, aunque parezca de mal gusto, realizar una lista con lo que deseas recibir en Navidad no es una idea tan mala.

La investigación indica que reduciremos el factor sorpresa, pero aumentaremos las posibilidades de que la sonrisa sea sincera al abrir el regalo. Esto genera satisfacción en quienes dan el regalo y la supera en quienes son sorprendidos con algo que deseaban.

Empatizar

Nunca es tan difícil analizar los gustos del otro o intentar imaginar qué es lo que se compraría tu amigo, hermano, mamá, papá o pareja.

Parece obvio pero no lo es. Investigaciones demuestran que si elegimos el regalo como si lo comprase el propio destinatario, damos en el clavo.

Mejor uno que dos

Varias veces no quedamos conformes con nuestros regalos y agregamos otro pequeño detalle. Según un estudio realizado por la profesora, Kimberlee Weaver, lo único que conseguimos es debilitar el valor del obsequio principal. Hecho que fue confirmado en la publicación del The Journal of Consumer Research.

En su prueba, dio a elegir entre la posibilidad de regalar un iPod Touch o un iPod con una descarga musical gratuita. La mayoría de los participantes eligieron el último paquete. Sin embargo, para una parte del grupo la descarga de canciones gratis abarató su percepción del dispositivo.

Sé práctico

Aunque muchos lo nieguen, en el fondo siempre está el deseo de impresionar con nuestro regalo o que la persona que lo recibe, nos recuerde. Pero hay que tener cierto cuidado, ya que este ego, puede transformar esos detalles únicos y originales, en extravagantes, imposibles o poco prácticos obsequios.

El País, señala que se realizó un estudio donde varios imaginaron que tenían que regalar un programa de edición fotográfica a un ser querido. Las opciones eran entre un software de alta calidad difícil de usar o un programa de valor inferior más sencillo. Como era de esperar la mayoría optaron por la primera opción. Sin embargo, los resultados revelaron que los destinatarios preferían el programa fácil aunque fuese mediocre.

El dinero le gusta a todo el mundo

Nunca ha estado en la lista de alguien regalar dinero, pero según una investigación en caso de duda, es la mejor opción.

En la investigación se pidió a los participantes que elaborasen listas de deseos con opciones por valor de 10 mil pesos. Cuando se les daba a elegir entre recibir un regalo no incluido en su relación o el efectivo, se descubrió contra el pronóstico de quienes regalaban, que preferían el dinero por encima de todo.