El canciller chileno Heraldo Muñoz afirmó este miércoles que Chile continuará negociando “de buena fe” el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TTP) con Estados Unidos, tema que fue parte de la agenda de la presidenta Michelle Bachelet durante su gira a Norteamérica.

El ministro Muñoz fue enfático en señalar que nuestro país tiene interés en logar concretar ese acuerdo. “Vamos a continuar negociando de buena fe de manera constructiva, pero velando también por nuestros intereses nacionales, por los intereses de los empresarios y de la sociedad civil, en aspectos como por ejemplo propiedad intelectual”, señaló.

En ese sentido, adelantó que hubo una buena disponibilidad por parte de Estados Unidos de negociar como corresponde en un tratado de esta naturaleza, lo que calificó como “muy positivo”.

Respecto a los términos del acuerdo, el canciller Muñoz sostuvo que si bien en toda negociación hay avances y retrocesos, durante la conversación con Barack Obama, la presidenta Bachelet “fue muy clara respecto a nuestros intereses”.

“La disposición es constructiva para seguir adelante, en la medida que el resultado de esta negociación sea balanceado”, agregó el jefe de la diplomacia chilena. En esa línea, descartó algún condicionamiento por parte de nuestro país, señalando que “Estados Unidos tiene mucho que decir, pero Chile está planteando sus posiciones (…) no hay condicionamiento, hay negociación”.

“Nosotros vamos a negociar para que se llegue a un acuerdo balanceado que refleje nuestros intereses”, sentenció.

Por último, adelantó que el presidente Obama propuso tener un borrador de acuerdo para noviembre coincidiendo con la reunión por la Cumbre de la APEC que este año corresponde en China.

El Tratado de Libre Comercio Transpacífico (TPP) es defendido por Estados Unidos, y agruparía 12 países, entre ellos Japón, Chile, México y Perú, todos ellos también miembros de la APEC. El gobierno de Obama ha estado tratando de impulsar el TPP, pero las negociaciones están estancadas por cuestiones relacionadas con los sectores de la agricultura y la industria del automóvil de Japón, celosamente controlada por ese país.