El precandidato republicano a la elección presidencial de 2012 en Estados Unidos, Mitt Romney, declaró este viernes que Dios había creado a Estados Unidos para que dirigiera al mundo, y acusó al mandatario demócrata Barack Obama de haber debilitado voluntariamente al país.

Romney buscó fortalecer sus credenciales como potencial comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, en momentos en que los sondeos lo muestran primero en intenciones de voto entre los precandidatos republicanos y en un cabeza a cabeza con Obama para la próxima elección de noviembre de 2012.

“Dios no creó a este país para que fuera una nación de seguidores. Estados Unidos no está destinado a ser uno de los varios poderes globales en equilibrio”, dijo Romney en su discurso de campaña más importante sobre política exterior.

“Estados Unidos debe conducir al mundo o lo harán otros”, agregó, señalando que el planeta sería más peligroso si Washington no jugara un papel de primer orden. El precandidato republicano pronunció esta alocución el día que se cumplen diez años del inicio de la intervención en Afganistán.

“Déjenme ser claro: como presidente de Estados Unidos, me dedicaré a (gestar) un siglo estadounidense”, señaló.

“Nunca, jamás, pediré perdón en nombre de Estados Unidos”, afirmó Romney rodeado por cadetes de Citadel, un colegio militar de Carolina del Sur.

Los republicanos califican los esfuerzos de Obama por mejorar la imagen de Estados Unidos fuera del país como una “gira de disculpas global” y acusan a su gobierno de debilitar el papel de Estados Unidos en el mundo.