La Bolsa de Nueva York cayó a este lunes a su nivel más bajo en 10 meses, luego del anuncio de la degradación de la nota de crédito de Estados Unidos: el Dow Jones perdió 5,55% y el Nasdaq 6,90%.

Según cifras definitivas, el Dow Jones Industrial Average abandonó 634,76 puntos a 10.809,85 puntos y el Nasdaq, de dominante tecnológico, 174,72 puntos a 2.357,69 puntos.

Es la primera vez desde octubre que el índice vedette termina bajo los 11.000 puntos y su peor jornada en términos de porcentaje desde diciembre de 2008, un período negro para el sector financiero.

El índice ampliado Standard & Poor’s 500 perdió por su parte 6,66% (o 79,92 puntos) a 1.119,46 puntos.

No ayudaron a los mercados los primeros comentarios de Obama en público desde que la agencia Standard & Poor’s decidiera bajar la tradicional nota “AAA” a “AA+” de la deuda estadounidense.

Obama dijo que “sin importar lo que pueda decir una agencia (de notación), fuimos y seremos siempre un país triple A”, al argumentar que la economía estadounidense es todavía una de las inversiones más seguras en el mundo.

Los mercados “ya estaban en plena baja, y la degradación es un shock adicional para los inversores nerviosos”, observó Nigel Gault, de IHS Global Insight.

La decisión de S&P no es necesariamente “responsable” de la caída del mercado, pero puso de manifiesto los problemas de funcionamiento a la cabeza del Estado federal sobre la cuestión del presupuesto y la desaceleración de la economía estadounidense, explicó Kenneth Polcari, de ICAP Equities.

En consecuencia, “el mercado debe reevaluar los riesgos y es exactamente lo que está haciendo”, concluyó el analista.

El mercado obligatorio, directamente concernido por la reducción de la nota estadounidense, paradojalmente se benefició con la decisión de S&P y se disparó. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, que evoluciona el sentido inverso a los precios, retrocedió a 2,338% contra 2,558% en la noche del viernes y el de los títulos a 30 años a 3,663% contra 3,823%, indicando que el mercado evoluciona en fuerte alza.

“La realidad es que la deuda estadounidense sigue siendo una buena inversión. Estados Unidos es la economía desarrollada más diversa, líquida y maleable y los bonos obligatorios detentan la posición envidiable de ser el mayor mercado mundial”, subrayaron analistas de Briefing Research.