El urgenciólogo de Red Salud UC, doctor Franco Utili, y el subdirector del Cituc, doctor Juan Carlos Ríos, entregaron recomendaciones sobre cómo evitar riesgos con los productos del mar y qué se debe hacer en la ayuda en caso de accidentes de tránsito u otros percances.

Para los especialistas lo importante es comprar alimentos en lugares establecidos y autorizados por el Servicio de Salud.

“Eso garantiza que los mariscos provengan de sitios donde está autorizada la pesca o la recolección de mariscos”, aseveró Ríos.

“Es muy importante, dijo, consumir los mariscos cocidos para evitar el vibrión parahemolítico que se puede producir, a pesar que ya no estamos en verano. Otra recomendación es evitar la contaminación cruzada con otros alimentos que se comen crudos. Por ejemplo, si está preparando choritos en una tabla, no utilice el mismo recipiente para picar la lechuga”, advirtió.

Según el especialista, en Chile uno de los riesgos más graves es el de marea roja que tiene toxinas que afectan el sistema gástrico, generando nauseas, vómitos, y diarreas. Pero también existe otra toxina más grave que puede provocar parálisis respiratoria. Es importante que si tiene problema para respirar o alguna reacción alérgica acuda de inmediato a un recinto de urgencias.

Respecto a los viajes que se producirán el fin de semana, el urgenciólogo Franco Utili, dijo que “los primeros auxilios pueden ser determinantes para salvar la vida de una persona, pero también cabe recordar que la prevención es un factor importante para evitar consecuencias mayores”.

Los especialistas hicieron recomendaciones sobre cómo proceder cuando se es testigo de un accidente y poder colaborar, expresando que primero hay que evaluar la magnitud del hecho, determinar la gravedad de lesiones y número de víctimas para solicitar apoyo. Igualmente, considerar elementos de protección personal y precaver seguridad de la escena.

Ante un accidentado se deben evaluar respuestas, verificar si la persona escucha y entiende, si se comunica, si siente dolor, si está consciente. En caso de inconciencia la persona requerirá de mayor ayuda.

Para los especialistas es importante restablecer la respiración del herido acostando a la victima boca arriba, sosteniendo el cuello e inclinarle la cabeza, hacia atrás. Luego apretar la nariz y darle respiración boca a boca 4 veces, para que el aire llegue a los pulmones cada cinco segundos. Observar el pecho, para comprobar si el aire sale de los pulmones y ver si el tórax baja.

Del mismo modo, si el accidentado tiene hemorragia, debe acostarlo y presionar su herida con una gasa, manteniendo la presión sobre ella. Si la compresa se empapa, no la quite y se recomienda aplicarle otra encima. Verificar si la víctima tiene fracturas, esguinces o luxaciones, si es así hay que inmovilizar la zona, esto puede hacerse con cartón, madera u otro objeto que permita alinear la parte afectada.

Si el accidentado esta inconsciente se debe colocar en posición de recuperación (de costado) lo que le permite respirar libremente e impide que se atragante e inhale, su propio vómito. Después de asegurarse que respira normalmente y de haber tratado cualquier lesión evidente, debe trasladarse a un servicio de urgencia.