Sacar el corazón de la lechuga puede ser un problema, ya que es un centro muy duro que a veces te hace perder gran parte del alimento y ni hablemos del tiempo que conlleva. Pero, existe una técnica para sacarlo, lo que hará que sea más fácil y rápido.
La lechuga es una de las ensaladas que siempre está en la mesa, es una opción segura que a la mayoría le gusta y se puede acompañar con distintas salsas, semillas y otras verduras.
Existen diferentes tipos, unas más grandes, otras pequeñas e incluso medianas, donde el sabor de cada unas de ellas cambia dependiendo de la raza, pero la más común es la que nos ofrece la señora del puesto de la feria: “caserita, ¿Cuál le doy? ¿escarola?”.
Pero, ¿sabías que mundialmente es conocida como lechuga iceberg? y que su cultivo fue introducido en Estados Unidos en 1894 por Washington Atlee Burpee Company.
Y es que la escarola tiene dos grandes características, una la duración y otra la resistencia, lo que la hace un producto llamativo para aquellas empresas exportadoras.
Su expansión fue grande, ya que… recordemos, antes solo había escarola en los supermercados y, por tanto, era la única presente en los hogares.
De sabor suave y color verde claro, más su textura crujiente la hacen ser una de las lechugas preferidas para acompañar burritos, sándwiches e incluso hamburguesas.
¿Cómo sacar el corazón de la lechuga?
Una gran dificultad -para muchos- es saber cortarla, ya que dentro de ella está el famoso “corazón”, un centro duro que odias que aparezca en las ensaladas.
En TikTok e Instagram existen diferentes alternativas, pero existe una que te hará ahorrar tiempo, fuerza y… lechuga.
Con esta técnica no necesitas cuchillo y solo te tomará segundos. Consiste en poner una tabla de picar y luego poner la lechuga encima, fíjate que el centro quede mirando hacia abajo.
Luego, la agarraras con ambas manos y golpeas dos o tres veces y ¡listo!, deberías tener fuera el centro duro que tanto detestamos.
Valor nutricional de la lechuga iceberg
Dentro de los tipos de lechuga la escarola es una de las que menos valor nutricional tiene para nuestro cuerpo, ya que -si bien- aporta agua, vitaminas y fibra, lo hace en menor cantidad que otras.
Uno de los nutrientes que más valor tiene son vitamina C con 2,8; potasio con 141; fibra con 1,4 y carbohidratos con 2,97.
Si la comparamos con una lechuga romana tiene vitamina C 13; potasio 230; calcio con 34,7 y carbohidratos con 1,4.
Expertos aconsejan incorporar a la dieta hojas más verdes, ya que eso significa que contienen mayor cantidad de nutrientes.
Por lo que, probar una variedad de hojas en tu ensalada aportará ricas vitaminas y un lindo plato.
