Una gran sorpresa se llevó un joven francesa cuando regresó a su departamento en Normandía, tras pasar 3 meses en cuarentena.
Al entrar a su vivienda a principios de junio, descubrió que había dejado una bolsa de papas en uno de los estantes de su cocina.
“Después de tres meses, mis papas decidieron crecer sin límite hasta hacer agujeros“, comentó a través de su cuenta de Twitter.
Durante su ausencia, los tubérculos germinaron y las raíces crecieron como enredaderas por una parte de la pared.
“Cuando llegué a casa, esperaba oler algo, y al final me sorprendió una extraña silueta en el fondo de la cocina”, reconoció la joven, compartiendo fotografías del momento.
“Hay que decir que estaba todo sumido en una completa oscuridad y a primera vista no pude distinguir las papas. Cuando encendí la luz, me reí mucho al ver los retoños de las patatas”, agregó.
Rápidamente las fotografías se hicieron virales, alcanzando más de 200 mil “me gusta”. Asimismo, otros usuarios que habían tenido la misma experiencia, compartieron sus registros.
¿Por qué ocurrió eso?
De seguro has visto una especie de manchitas en la piel de las papas, en las cuales con el pasar del tiempo, comenzarán a crecer los brotes. Dichos puntos son los nudos del tallo, explica el diario electrónico El Español.
Esto significa que bajo ciertas condiciones de humedad, calor y luz, la planta comenzará a brotar de nuevo. Por este motivo, es recomendable guardarlas en un lugar fresco, oscuro y seco.
No obstante, más temprano que tarde, los nuevos tallos acabarán apareciendo en el tubérculo, tal y como le ocurrió a la joven francesa.
¿Se pueden consumir papas con brotes?
Según explica el sitio especializado Medline , consumir papas con brotes puede provocar una intoxicación, debido a la solanina.
Se trata de un alcaloide tóxico de sabor amargo que existe de forma natural en la papa y otras especies similares. Su función es proteger al tubérculo de los patógenos e insectos. Se encuentra por debajo de la piel, en los llamados “ojos” y sus brotes.
El sitio de noticias BBC, recordó un caso ocurrido en 1978, cuando 78 colegiales del sur de Londres sufrieron diarrea, vómitos y otros síntomas como alucinaciones, después de consumir papas hervidas.
La investigación reveló que los tubérculos se habían quedado en los almacenes de la escuela durante más de tres meses. Además, los análisis posteriores revelaron que las papas estaban repletas de solanina.
Por este motivo, en el caso de que tengas papas con brotes en casa, la mejor opción es sembrarlas nuevamente y obtener tu propio cultivo (siempre y cuando dispongas del espacio para hacerlo).
