VER RESUMEN
Resumen automático generado con Inteligencia Artificial
Un estudio de la Universidad de Cambridge, publicado en la revista European Review, revela que la percepción de que el tiempo pasa más rápido a medida que envejecemos se debe a una combinación de factores psicológicos y fisiológicos que afectan nuestro cerebro. Diferenciando entre el "tiempo del reloj" y el "tiempo que percibe nuestra mente", los científicos explican que nuestra atención, memoria y calidad del sueño influyen en cómo experimentamos la duración de los eventos. Además, el impacto de las redes sociales en los jóvenes también contribuye a esta sensación de rapidez en el transcurso del tiempo.
Desarrollado por BioBioChile
¿Alguna vez te has preguntado por qué el tiempo parece pasar más rápido a medida que pasan los años? No estás solo en esta reflexión. Es una sensación bastante común, y los días, e incluso los años, parecen acortarse conforme nos hacemos mayores.
Un estudio reciente de la revista European Review, de la Universidad de Cambridge, ha intentado explicar este fenómeno.
Según los investigadores, hay una combinación de factores psicológicos y fisiológicos que afectan nuestra percepción del tiempo. Esto incluye desde cómo procesa nuestro cerebro las imágenes hasta los cambios en nuestra atención y memoria.
Los científicos diferencian entre el “tiempo del reloj” y el “tiempo que percibe nuestra mente”. Aunque el tiempo en sí no cambia, nuestra percepción puede hacer que sientamos que los eventos ocurren más rápidamente o más lentamente de lo que realmente sucede.
Curiosamente, mientras más activos y atentos estemos durante el día, más eventos y experiencias lograremos almacenar en nuestra memoria. Esto puede llevarnos a creer que el tiempo pasó más despacio.
¿El tiempo pasa más rápido con los años?
A medida que envejecemos, la rapidez con la que nuestro cerebro procesa las imágenes disminuye, lo que paradójicamente nos hace percibir los días como más cortos.
La calidad de nuestro sueño también juega un papel crucial en cómo percibimos el tiempo. Un mejor descanso nos hace más conscientes de nuestro entorno y, por ende, del tiempo que pasa.
Por último, el estudio menciona un efecto curioso de las redes sociales en los jóvenes, que al igual que los adultos, sienten que el tiempo vuela debido a la disminución de la atención que provocan estas plataformas.
Este conocimiento nos ayuda a entender mejor por qué sentimos que los años se aceleran a medida que acumulamos más vivencias.