La "Operación London Bridge", u “Operación Puente de Londres”, es el protocolo que la propia Reina Isabel II aprobó para el día de su fallecimiento.

¿Qué ocurre si muere en ejercicio la reina de la Familia Real Británica? En los últimos años, la pregunta ha rondado más de alguna vez en Reino Unido y los pasillos del Palacio de Buckingham, donde se ha dispuesto un complejo protocolo aprobado por la Reina Isabel II para cuando esto ocurra.

Se trata de la “Operación Puente de Londres” (Operación London Bridge”), plan que se llevará a cabo horas después del fallecimiento y que, tal como adelantaba el portal Politico meses atrás, ha tenido actualizaciones con el paso del tiempo.

Según el medio, esto incluirá un apagón temporal de las redes sociales de la Familia Real, algo muy distinto a lo que ocurrió para el deceso del príncipe Felipe de Edimburgo, donde fueron precisamente las plataformas digitales las que anunciaron el hecho.

Donde sí se publicaría información es en la web principal de la Familia Real, donde se dispondrá una página en negro en señal de luto con un breve comunicado que confirmaría la muerte de Lilibeth. Lo mismo ocurriría en las plataformas del gobierno británico y las páginas sociales de sus instituciones asociadas.

“London Bridge is down”, es la frase con la que se informará la situación al Jefe de Estado británico, a través de una línea segura para que se difunda el comunicado a los gobiernos donde la Reina Isabel aún es jefa de Estado oficial.

Según Vanity Fair, respecto a la prensa, “se compartirá con la Press Association de Reino Unido y, después, con el resto de medios a nivel mundial”.

En ese momento, “las televisoras públicas deberán contactar con la BBC1 y, aunque las cadenas privadas no tienen obligación de hacerlo, probablemente lo harán. Se cancelarán temporalmente todos los programas humorísticos y el código de vestimenta de los presentadores será estricto”.

Si la monarca fallece fuera del Reino Unido, será trasladada en un avión hasta Londres, pero si muere en su residencia de Sandringham en Norfolk, volvería a la capital de Inglaterra en un auto fúnebre.

Sin embargo, el escenario más complejo es si fallece en el Castillo de Balmoral en Escocia, donde acostumbra a pasar tres meses al año. En ese caso, se realizarían varios ritos escoceses antes que su cuerpo vuelva a Londres.

El duelo para su reino durará 12 días, que culminarán con el funeral. En este tiempo, una serie de eventos se realizarán en torno al velorio de la monarca, que incluiría que los propios británicos puedan asistir a rendirle homenaje.

Operación London Bridge: ¿Quién asumirá el trono?

Según el experto Luis Clemente, académico de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile, será el hijo mayor de la reina Isabel quien asumirá la corona una vez que muera.

“Lo cierto es que sea popular o impopular, es el actual príncipe Carlos quien sea coronado como rey, después él decidirá si abdica, como hizo por ejemplo el rey de España por los problemas que había en torno a algunos casos de corrupción y su avanzada edad”.

La sucesión de Carlos en el trono implicará otra operación para la Familia real: la “Operación Spring tide”, u “Operación Marea de Primavera”.

A las 11 de la mañana del día siguiente de la muerte de la reina Isabel II, el príncipe Carlos será proclamado como rey y posteriormente tendrá una audiencia con el Primer Ministro Británico, la que será exclusivamente con él y su gabinete, pero sin que sus esposas los puedan acompañar.

Al tercer día, Carlos comenzaría una gira por el Reino Unido visitando Escocia, Gales e Irlanda del norte, para participar en ceremonias que honrarán a su madre. Pero, ¿qué sucederá con Camilla, la actual duquesa de Cornuales, a quien no se le otorgó el título de “Princesa de Gales” una vez que se casó con Carlos?

Según Vanity Fair, la mayoría de los expertos creen que se convertiría automáticamente en reina consorte, pero aún no está claro cuál será la decisión de Carlos, y si él nombrará reina a Camilla considerando que elegirla “princesa consorte” podría resultar un paso en falso y una humillación para la duquesa (sugeriría que no está preparada para el cargo).

A juicio de Clemente, en el marco de la Operación London Bridge, la posibilidad que Carlos asuma es plausible y no abdicaría en favor de su hijo Guillermo. “Creo que sí, lleva preparándose o esperando ese momento mucho tiempo, de hecho nos podemos basar para afirmar que el sí tiene esa inclinación es que él si cumple con todos los actos de protocolo a los que debe asistir”.

De acuerdo al experto, Carlos nunca se ha negado a asumir sus compromisos reales. “Nunca se ha visto con pocas ganas de participar, así que en principio no hay ningún indicador de que no pueda asumir”, dijo.