Si perdemos la visa Waiver no solo será un fracaso diplomático y una derrota para el gobierno en materia de seguridad, sino que también dejará a Chile bajo vigilancia mundial respecto de sus turistas que visiten otros países.

A raíz de la creciente ola de delitos perpetrados en EEUU a manos de bandas de delincuentes chilenos, es que la Embajadora de Estados Unidos en Chile, Sra. Bernadette Meehan, afirmó que: “Tiene que ser más eficiente la forma en que compartimos la información sobre la visa Waiver”.

Tras el mal uso del programa de visado por parte de bandas que cometen delitos en territorio norteamericano, el mal llamado “Turismo delictual”.

Ya han sido varias las oportunidades en donde este tema ha estado en la palestra pública nacional, colocando en duda (y en riesgo) la continuidad del programa. Sin embargo, hace algunos días el Subsecretario del Interior, Manuel Monsalve indicó que: “No están ciegos respecto a quién viaja a Estados Unidos” haciendo alusión a que los oficiales de inmigración estadounidenses tienen los antecedentes penales (o policiales) de las personas que hacen ingreso al país.

¿Qué ocurre entonces?
¿Es un problema administrativo o tecnológico entre las policías?
Algo -al menos comunicacional- no cuadra.

Cómo operan las bandas en Estados Unidos

El perfil delictual según algunos estudios afirma que el 90% de los detenidos son chilenos con edades de entre 18 a 38 años de edad. Los delitos son, principalmente, robo a casas en sectores residenciales acomodados en diferentes Estados; bandas que actúan en una especie de “jauría delictual”.

Poseen conocimientos en el uso de alarmas residenciales, utilizan inhibidores de señal y procuran evitar que trozos de vidrio caigan al interior del domicilio vulnerado para no activar los sistemas de alarma, cuando rompen las ventanas.

Todo esto con un aparente entrenamiento previo, que sin duda, lo tienen.

Qué dicen las autoridades comprometidas

Cientos de casos documentados por las policías estadounidenses dieron el argumento suficiente, para que en 2023 representantes del Partido Republicano (de Estados Unidos) presionaran para sacar a Chile del programa de exención de visas, debido a que afirmaron que nuestras autoridades se mostraron reacias a brindar antecedentes policiales de quienes viajaban a los Estados Unidos.

El Subsecretario Monsalve, manifestó que cuando el gobierno asumió en marzo de 2022 el programa ya se encontraba “en riesgo” y que gracias a una “mesa de trabajo” con el gobierno de Estados Unidos, la visa Waiver se logró mantener vigente, tras un supuesto intercambio de información que brindaría garantías, inexistentes hasta entonces.

Si el gobierno de Chile afirma que sí facilitaron la información a los Estados Unidos, ¿por qué las autoridades estadounidenses dicen lo contrario? Si los antecedentes y la “mesa de trabajo” se llevó a cabo en 2022, algo entonces claramente no está funcionando.

Todo apunta entonces a que se han brindado soluciones temporales para “salir del paso” (cada vez que surge un problema) como se suele escuchar coloquialmente en boca de quienes realizan menos de lo justo en sus actividades diarias. Las autoridades chilenas nos han dicho durante el último año que esto es un “trabajo serio”, pues al parecer lo es pero que carece de profesionalismo, de eficiencia y de hechos concretos.

Solución que nadie se atreve a ejecutar

Tras esta serie de hechos internacionalmente vergonzosos por parte de la diplomacia chilena ¿no será el momento de repensar en cómo se ejecutan las soluciones? En el mundo empresarial lo denominamos “pensar fuera de la caja” cuando se buscan soluciones, al menos, distintas a los procesos a los cuales estamos acostumbrados.

Lo que ocurre es que muchas veces la solución no gusta, no agrada al directorio. En este caso, al gobierno.

En Chile no existe mayor tramitación ni restricción para obtener un pasaporte. Al revisar el Reglamento de Pasaportes nos encontramos con que solo basta con ser chileno y ser mayor de 18 años de edad ¿No será momento para modificar las reglas del juego? Las autoridades podrán decir que a quienes tienen arraigo nacional se les prohíbe la emisión del documento, sí, es cierto pero no es suficiente.

Una persona que cumplió condena por robo, tendría que tener arraigo nacional por defecto de al menos cinco años y ampliar esta sanción a quienes tengan antecedentes más graves, que la restricción sea de carácter permanente, prohibiéndoles de esta manera de participar en delitos “internacionales”, truncando así las expectativas delictivas de estas bandas o de quienes piensan que podrán hacer de sus vidas, una carrera delictiva en el extranjero.

Es cuestión de tiempo. Si perdemos la visa Waiver no solo será un fracaso diplomático y una derrota para el gobierno en materia de seguridad, sino que también dejará a Chile bajo vigilancia mundial respecto de sus turistas que visiten otros países.

Al final del día, solo dejará contentos a todos aquellos de pensamiento extremo que se opusieron al programa desde su génesis.

Por Kevin Herrera

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