Un juez del séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, denunció la grave violación de derechos fundamentales en el módulo 88 del Centro de Detención Preventiva (CDP) Santiago 1.

Se trata de un informe de cuatro páginas que redactó el juez Cristián Sánchez, en el cual describe las circunstancias en las que viven los imputados y señaló que “hay una percepción de abandono por las condiciones en que los mantienen Gendarmería de Chile y los tribunales que los han privado de libertad”.

En esa línea, sostuvo que los gendarmes de la unidad penal no utilizan mascarilla de acuerdo con los protocolos sanitarios, y relató que seis imputados se encontraban dentro de una celda de 2 metros por 3 metros quienes no cuentan con agua, ducha, inodoro y luz eléctrica.

Además, los propios condenados explicaron que no tienen acceso al patio común por lo que incluso algunos de sus compañeros no han realizado esa actividad durante 6 meses.

Por otro lado, se refirió a casos sanitarios y de salud que agobian a tres reos del complejo. El primero denunció tener VIH positivo y reclama que no ha sido atendido pese a sus constantes reclamos.

En el segundo caso, un hombre afirmó tener sarna -la cual es visiblemente evidente según el juez- además señaló ser esquizofrénico sin tratamiento ni diagnóstico. Por esta razón, logró ser llevado hasta enfermería para realizar un tratamiento de urgencia de sus lesiones.

Mientras tanto, un tercer imputado cuestionó la accesibilidad del complejo ya que se encuentra en situación de discapacidad por movilizarse con muletas.

Ante estos hechos, “varios explican que mantienen huelgas de hambre como medidas de presión para superar sus patologías o lograr un cambio de unidad penal”, según lo consignó Sánchez en el escrito.

Por último, Sánchez explicó que “el acceso es obstaculizado por abundante basura existe en el lugar, plásticos, papeles y restos de comida, que debió ser empujada hacia un costado por un funcionario de Gendarmería para poder caminar y llegar hasta la reja de acceso”.