Amenazados con un machete y una escopeta. Ese fue parte del violento panorama que debió enfrentar un matrimonio de la comuna de Talcahuano, región del Bío Bío, luego que cinco delincuentes entraran a robar a su hogar.

Un violento asalto sufrió un matrimonio, luego que cinco delincuentes ingresaran a su domicilio ubicado en calle Las Algas del sector Lobos Viejos de Talcahuano, región del Bío Bío.

A su vez, los afectados acusaron lentitud por parte de Carabineros ante los llamados efectuados, lo que fue descartado por la policía civil.

La señora Oswalda Silva quedó aterrada con la experiencia que enfrentó por la acción de cinco desconocidos, quienes armados con un machete y una escopeta entraron por la fuerza a su casa, ubicada a una cuadra del campamento Algas Bajas, desde donde la víctima acusa provinieron los responsables del hecho.

El grupo en cuestión la amenazó y robó todo lo que pudo, destruyendo todo lo que no se lograron llevar, como un televisor empotrado a la pared del living, explicó Silva.

El robo con intimidación y violencia se registró cerca de las 22:00 horas de este miércoles, durante el cual llegó su marido, Pedro González, un predicador evangélico que denunció el clima de permanentes amenazas que los vecinos sufren por parte de algunos habitantes del campamento aledaño.

Además, aseveró que Carabineros respondió con lentitud, sin capturar en flagrancia a algunos de los sujetos que merodeaban con las especies sustraídas, como si fueran un trofeo.

Uno de los delincuentes incluso amenazó a la mujer con cortarle el dedo anular para arrebatarle así su anillo de matrimonio, agregando más angustia a la afectada.

A su vez, la policía uniformada señaló que investiga el episodio, descartando una tardanza y falta de diligencia, indicó el capitán Richard Parada, de la Segunda Comisaría de Talcahuano.

Los responsables del robo usaron máscaras para ocultar sus rostros, mientras que las especies robadas fueron avaluadas en dos millones de pesos.

El inmueble afectado por el asalto se ubica en cercanías de la toma donde el pasado de 3 de junio falleció Kimberly Verdejo, joven de 23 años con seis meses de gestación que sufrió un impacto de bala cuando estaba al interior de su vivienda.