En una resolución que cambia el actual escenario en el conflicto entre el Colegio Almondale Valle y los padres de de 800 alumnos, la Corte de Apelaciones de Concepción ordenó al sostenedor iniciar el proceso de matrícula.

Fue a través de una orden de no innovar, acogida en una presentación de la apoderada Sonia Baeza, que la justicia decretó el inicio del proceso de manera que el establecimiento comience sus clases en marzo en la actual modalidad de particular subvencionado.

En diciembre, la Fundación Educacional Valle había informado el fin del colegio, la cancelación del proceso de matrícula y la creación de un nuevo ente que se haría cargo del proyecto educativo, pero como particular pagado, lo que fue rechazado por los apoderados.

La situación, sin embargo, hizo crisis hace unos días cuando Almondale Valle se declaró en quiebra, lo que generó una decisión del Ministerio de Educación de nombrar un administrador provisional, que se hiciera cargo del establecimiento y así diera tranquilidad a los alumnos, cuyos padres estaban en la total incertidumbre sobre el futuro educacional de sus hijos.

En este estado de las cosas, la apoderada solicitó una orden de no innovar que obligara al Colegio Almondale Valle a iniciar el proceso de matrícula, petición acogida por la Corte de Apelaciones de Concepción, a la luz de los antecedentes que dan cuenta de la incertidumbre que viven los padres tras la decisión del establecimiento de no continuar el proyecto educacional.

La medida fue recibida con alegría por el Centro de Padres del Almondale Valle, su presidente Rubén Valderrama, enfatizó en la esperanza de que el proceso comience a la brevedad y haciendo un llamado a los representantes del colegio.

La orden de no innovar no interfiere con la decisión del Ministerio de Educación de nombrar un administrador provisional para el establecimiento, según confirmó el seremi Fernando Peña, subrayando en que lo ordenado por la justicia agilizará el trabajo al que deberá abocarse el interventor.

Desde la Fundación Educacional Valle indicaron que estaban analizando la resolución de manera de decidir los pasos a seguir, pudiendo estar entre ellos un recurso para intentar revertir la orden de no innovar y además allegar los antecedentes que faltan en la declaración de quiebra, proceso paralizado por el Segundo Juzgado Civil penquista por errores en la demanda que invocó el proceso de liquidación.