241 pymes de la región del Bío Bío afectadas por robos y actos vandálicos recibirán en los próximos días la primera ayuda del Estado que llega a 643 millones de pesos. Se abrió un nuevo catastro para la incorporación de otros comerciantes, mientras se busca ayuda también para los afectados por bajas ventas

El primer balance que hizo el Gobierno arrojó 477 pymes afectadas en la zona, pero luego se depuraron los datos, pues algunas de ellas no presentaban daños o pérdidas por saqueos y otras tenían deudas tributarias o laborales.

Las que cumplían requisitos quedaron finalmente en 241 empresas, las que recibirán montos no reembolsables entre 350 mil pesos y 4 millones, indicó el seremi de Economía, Mauricio Gutiérrez.

Baja de 70% en ventas

En algunos sectores del casco céntrico, aún sin haber sido tocados por la delincuencia, hay locatarios que han visto una baja de cerca de un 70% en las ventas en el último mes.

Para ellos, se está gestionando también algún tipo de ayuda, y esa situación en particular fue planteada hoy en la Comisión de Fomento del Core.

Sara Cepeda, vicepresidenta de la Cámara de Comercio de Concepción, había asegurado durante el martes que la próxima semana se conocerán los resultados del catastro iniciado y que si bien no cuentan con una estimación de desempleo en el sector, sólo en PreUnic hay 90 personas que no serían reubicadas.

Más tarde, desde la Cámara de Comercio salieron a descartar que las 90 personas no serían reubicadas:

En la mañana la vicepresidenta de la Cámara de Comercio hizo una declaración desafortunada, diciendo que los trabajadores de PreUnic serían despedidos, cuando la realidad es que serán reacomodados en los distintos locales.

En PreUnic, como en Salcobrand, todas las personas con locales afectados son reubicados y el 60% vuelve a operar en pocos días, el 40% restante demora más por la magnitud de los daños, pero nadie será o ha sido desvinculado por esta situación.

Galería

El anuncio de estos beneficios para pymes se hizo en el ingreso a la Galería Alessandri, que fue reabierta esta semana tras el incendio que afectó a la Gobernación y al tradicional centro comercial.

En algunos locales las condiciones son muy precarias, no han podido comenzar a atender pues no cuentan todavía con energía eléctrica, y piden ayuda del Estado, propietario de la galería.

Ni siquiera la oficina de Extranjería está en condiciones de operar con normalidad, y eso que está en el pasillo que resultó menos afectado. Las librerías, con el humo y el agua, perdieron toda su mercadería.

Ayer lunes se reabrió el catastro de pymes afectadas por situaciones de violencia en el marco de la crisis social, y estará disponible hasta el 25 de noviembre. Los detalles de la inscripción se pueden conocer en Corfo, Sercotec y centros de negocios.