Con una carta dirigida al empresario Leonidas Vial y a su familia, una mujer de Cachagua en la comuna de Zapallar -región de Valparaíso- busca recuperar su vivienda rematada por el Fisco, debido al no pago de contribuciones.

La casa avaluada en más de 700 millones fue comprada por la empresa La Viña S.A de propiedad de dicha familia, quienes sólo pagaron 400 millones en el remate, en donde además fueron los únicos oferentes.

En la carta, Virginia Struthers le pide expresamente a Leonidas Vial, a su esposa y 7 hijos, que necesita recuperar su casa que esta ubicada en la calle Los Maitenes, en el lujoso balneario de Cachagua, precisamente en la Playa Las Cujas, una de las favoritas de quienes visitan la zona.

La casa fue rematada el 6 de agosto de 2019, tras acumularse 3 cuotas de contribuciones impagas (cerca de 2 millones de pesos) y que no pudo pagar tras la quiebra de su negocio. Del remate habría sido notificada por una carta dejada en el portón de madera de su casa, sin embargo, Struthers desconoce haberla recibido.

Fue en septiembre del presente año, cuando llegó el receptor judicial acompañado por carabineros y procedieron a desalojar el inmueble.

Sin nada más que hacer, la mujer de 63 años debió sacar lo que pudo y con la ayuda de algunos vecinos y amigos, trasladó a sus mascotas y pertenencias hasta una pequeña cabaña que arrendó en la misma localidad.

Ignacio Caballero

Desde ese día, comenzó con una cruzada para poder recuperar la que fue la casa de sus padres, comprada en el año 1962 y que heredó junto con sus otras dos hermanas, quienes residen en Alemania.

Por esto apeló a la Corte Suprema, pagó las contribuciones adeudadas, ha asistido a reuniones con el alcalde y Ministros. Incluso ofertaron 100 mil dólares a Leonidas Vial para que desistiera, sin embargo, hizo una contra oferta de 200 mil dólares, monto inalcanzable para Struthers.

Ahora por medio de una carta firmada y respaldada por más de 200 vecinos, intentará apelar a los sentimientos del empresario.

“Que en el fondo se den cuenta de la historia que hay detrás de lo que ellos consideran un simple remate (…) después de haber pagado 50 y tantos años de contribuciones, ¿Dónde está el Estado?”, señaló la mujer.

Raúl Arriagada, vecino y amigo de Virginia Struthers, indicó que a todas luces en este caso “hay mano negra”. “Por deber sólo tres cuotas, que es menos del 1% del valor. Para nosotros es inaudito, no es común que Tesorería lo haga. De verdad nos parece más que sospechosos”, agregó.

Actualmente Virginia Struthers vive junto a sus mascotas en una pequeña cabaña que un vecino del sector le arrendó. Ahí mantiene parte de las cosas que alcanzó a sacar antes de ser desalojada. Desde ese lugar, señaló, seguirá luchando por recuperar su hogar.

Lee la carta completa aquí: